Cinco días fueron los que Salvador Cabañas estuvo con coma inducido, luego de que en la madrugada del lunes recibiera un balazo en la cabeza en un centro nocturno de Ciudad de México.

El atacante de la selección paraguaya y del América ha respondido bien, pese a que no se le pusiera extraer el proyectil calibre 25 que se mantiene alojado en la cabeza.

Luego de que ayer se le practicara una nueva tomografía, el cuerpo médico del Hospital Angeles determinó disminuirle la sedación. Fue así como en la noche del sábado el "Chava" recuperó la consciencia y pronunció sus primeras palabras.

Quién habló con el goleador fue Aldo Martínez, el médico de la selección paraguaya: "El me dijo, estoy bien y me lo dijo en guaraní", narró el profesional, según el diario El Universal de México.

"Aunque no pertenezcamos a alguna religión en específica todos creemos en dios, es difícil definir los factores que intervinieron, si las maravillosas manos del doctor, el milagro de dios, todo", comentó Martínez visiblemente sorprendido por la recuperación de Cabañas.

El doctor del equipo que participará en el Mundial de Sudáfrica comentó la gran alegría que dominó a la familia del jugador ante la buena respuesta que ha tenido al tratamiento. "Una gran alegría, nos abrazamos todos al salir de ahí, no estuvimos en la terapia y estuvimos siempre atentos y estamos contentos y felices, sabiendo lo grave que aún sigue", comentó.

Sobre las secuelas que presentaría el atacante, Martínez no quiso pronunciarse. "Esto es un milagro y pueden seguir ocurriendo no sabemos lo que vamos hacer, el doctor fue claro, no se puede hablar de secuela, de futuro, de carrera, de Mundial; hoy se puede hablar de Salvador la esta peleando y esta saliendo para salvar su vida", concluyó.