El Festival Internacional de Teatro Chéjov es uno de los más importantes del mundo, donde se presentan los trabajos más interesantes del teatro mundial, los que en gran parte determinan hoy el desarrollo del arte a escala internacional.

El Teatro Mundial y el Programa Moscovita conforman las dos partes de este festival. Durante dos meses y medio actúan compañías de Moscú  y de doce países extranjeros, entre ellos, Alemania, Taiwán, Gran Bretaña, Australia, Letonia y Chile.
 
Este año y luego de dos años de intensas gestiones por parte del Festival Santiago a Mil, por primera vez Chile se sube a las tablas de este importante escenario. Los protagonistas son la compañía Milagros con la obra El Capote, del escritor ruso Nikolai Gogol, quienes se presentan desde ayer y hasta el 26 de junio.
 
Evelyn Campbell, productora general de Santiago a Mil asistió al estreno de la obra nacional. "La primera función fue un éxito,  con muy buena recepción de los críticos y el público. Estaban muy emocionados porque para ellos es un cuento entrañable y conocido por todos. Representa la condición de muchos rusos que se ven reflejados en un solo personaje", comentó.
 
El Capote, ganadora de Fondart 2006 y dirigida por Aline Kuppenheim y actuada por Tiago Correa, Loreto Moya, Paola Giannini y la propia Kuppenheim, es un cuento de carácter universal y fue considerado incluso por Dostoievsky, como una obra fundamental. "Todos salimos del capote", dijo, probablemente sin sospechar que un siglo y medio más tarde, el 2008, en Santiago de Chile o en cualquier lugar del mundo, su vigencia permanecería con la misma fuerza, desgranando en cada escena la vida mínima de su protagonista.
 
Esta obra de marionetas, diseñada sobre un teatrito a escala, es el resultado de casi dos años de trabajo donde la Compañía Milagros, se entregó por completo a la medieval tarea de adaptar, diseñar, fabricar, buscar y ensayar movimientos humanos.
 
Son tres muñecos de unos 70 cms, con cuerpos de madera, manos y caras de espuma látex, cinco títeres y cuatro actores vestidos y enmascarados de negro (para mimetizarse con el fondo) que son manipulados a través de varillas.
 
Las relaciones entre el Festival Internacional Santiago a Mil y el Festival de Chejov, continuarán entregando frutos para las compañías nacionales. El 2010, para los 150 años del nacimiento de Anton Chejov, la compañía Teatro en el Blanco se presentará con la obra Neva en las tablas rusas para homenajear al reconocido autor. Mientras tanto la compañía Teatro Cinema prepara las maletas para formar parte de la IX versión en el año 2011.