Tras un 2016 marcado por el Brexit y la elección de Donald Trump, una de las novedades que entrega la última edición del Indice de Democracia elaborado por The Economist Intelligence Unit (EIU) es la ubicación de EE.UU., que pasó de ser una "democracia plena" a una "democracia imperfecta", según revela el estudio.

El Indice de Democracia de la EIU se basa en cinco categorías: proceso electoral y pluralismo; libertades civiles; funcionamiento del gobierno; participación política, y cultura política. De acuerdo al puntaje obtenido en estas categorías, cada país es clasificado en cuatro tipos de régimen: "democracia plena", "democracia imperfecta"; "régimen híbrido" y "régimen autoritario".

En el caso de EE.UU., su puntaje pasó del 8,05 obtenido en 2015 al 7,98 del año pasado, haciendo que la principal superpotencia económica del mundo cayera por debajo del umbral de 8,0 que configura una "democracia plena". Las categorías donde EE.UU. fue calificado con menos de 8,0 fueron funcionamiento del gobierno (7,14) y participación política (7,22).

"La confianza popular en el gobierno, los representantes electos y los partidos políticos ha caído a niveles extremadamente bajos en Estados Unidos. Esta ha sido una tendencia de largo plazo y que precedió a la elección de Trump como Presidente de Estados Unidos en noviembre de 2016 (...). Esto ha tenido un efecto corrosivo sobre la calidad de la democracia en EE.UU., como se refleja en la disminución del puntaje de EE.UU. en el Indice de Democracia", precisa el estudio.

Sin embargo, la investigación de la EIU aclara que "Trump no es culpable por esta disminución en la confianza, que antecedió a su elección", aunque reconoce que "él fue el beneficiario de ésta". "La confianza popular en las instituciones políticas y en los partidos sigue disminuyendo en muchos otros países desarrollados", agrega.

En el Indice de Democracia 2016, que consideró a 167 países y territorios, el puntaje global promedio fue de 5,52, un retroceso respecto al 5,55 de 2015 (en una escala de 0 a 10). Unos 72 países experimentaron un descenso en su puntaje total en comparación con 2015, casi el doble de los países que registraron una mejora (38). Los otros 57 países se estancaron. En general, 19 países fueron clasificados como "democracias plenas", 57 como "democracias imperfectas", 40 como "regímenes híbridos" y 51 como "regímenes autoritarios".