Partieron en 2010 transformando el puerto en una gran sala de exposiciones, siguieron en 2011 centrándose en la fotografía de viaje y en 2012 explorando el tema del archivo fotográfico teniendo de emblema la obra de Sergio Larraín. Este año, la cuarta versión del Festival Internacional de Fotografía de Valparaíso (FIFV) apuesta por la experimentación. "La ciudad nos inspira para realizar un trabajo colectivo. Queremos que la gente sienta la adrenalina de sacar adelante esta exposición que se arma, concibe e imprime durante el festival", dice el fotógrafo Luis Weinstein, uno de los organizadores.

Así, desde hoy y hasta el 9 de noviembre, la ciudad puerto acoge a 30 fotógrafos locales y extranjeros quienes dictan charlas y talleres de creación fotográfica. Los resultados se tomarán las calles a medida que las imágenes se impriman en un gran laboratorio fotográfico instalado en el Parque Cultural de Valparaíso (PCV) y que estará abierto a público.

La plaza Victoria será uno de los lugares centrales para una serie de intervenciones urbanas: desde el viernes se exhibirán obra de las Brigadas de Acción Fotográfica y desde el sábado se realizará la actividad Un día con, donde fotógrafos guiarán recorridos por Valparaíso para tomar fotos que luego serán exhibidas en las plazas. Rodrigo Casanova liderará un recorrido nocturno por la ciudad, Jorge Brantmayer hará un taller sobre retratos y Nicolás Wormull sobre creación de postales. El sábado, en la plaza Sotomayor, el estadounidense Matt Sieber intervendrá con carteles y proyecciones el edificio del CNCA, co-organizador del evento. El colectivo Gálvez Inc inaugura el próximo miércoles el Walltoheaven, un ciclo de fotos a gran escala en el cerro Concepción. Allí se instalará un muro de 12 x 2 metros con fotos que irán rotando cada tres meses.

Uno de los objetivos del festival es fomentar los colectivos fotográficos. El español Juan Valbuena hablará mañana, a las 18 horas, en el PCV, sobre su experiencia en el colectivo NoPhoto. "Estuve en Concepción compartiendo con colectivos de foto chilenos y creo que lo que falta es profesionalización. En mi caso, trabajo no sólo con fotógrafos, sino con diseñadores, artistas e ingenieros. Tenemos una editorial, hemos trabajado con el Museo Reina Sofía y el Thyssen-Bornemisza. Usamos la foto como punta de partida pero la idea es destruir los límites", dice Valbuena. En el festival también estará el fotógrafo Bertrand Meunier del colectivo francés Tendance Floue y los chilenos Pío Figueroa, de Cía de Foto, y Fernando Melo, de Colectivo Concepción Fotográfica. Todos ellos expondrán sus trabajos en el Parque Cultural de Valparaíso.

Otra figura es Pablo Ortíz Monasterio, fundador del Centro de la Imagen de México y autor de varios libros como Frida Kahlo, sus fotos, y A través de la máscara, sobre el retrato en México. Entre el lunes 4 y viernes 8, el mexicano dictará el taller de creación de un fotolibro y hará una charla sobre el tema, hoy a las 18 horas, junto a Paulo Slachevsky de Editorial Lom.

"Desde mediados del siglo XX, que la foto encuentra en el fotolibro una permanencia, una larga vida. Hoy, cuando, se hacen millones de fotos en el mundo, es importante que el fotógrafo sea un autor y no sólo en un registrador de escenas. Que a través de la foto tenga algo qué decir y que esa visión de mundo quede estampada en un fotolibro es clave", señala Ortíz.

En el festival habrá lanzamientos de fotolibros, como Radioretratos de Jorge Aceituno, Hijos del exilio del francés Eric Facon y Ciudad Juárez de la mexicana Mayra Martell. También se proyectarán documentales como Blanco y negro (lunes, 17 h), sobre Jürgen Schadeberg que retrató el apartheid en Sudáfrica y La maleta mexicana (miércoles, 16.30 h) sobre el archivo del húngaro Robert Capa.