El grupo español Marsans podría demandar por más de US$1.560 millones al Estado argentino ante el CIADI en el caso de que decida expropiar sus compañías Aerolíneas Argentinas y Austral, según confirmó su director general, Vicente Muñoz, al diario "Perfil" de Buenos Aires.

"No vamos a reclamar los US$450 millones que vale la empresa según nuestra valuación, sino que vamos a litigar por todos los daños causados desde 2005, con tarifas congeladas, subsidios incumplidos y gremios adictos al gobierno haciendo huelgas salvajes", afirmó Muñoz, según publica hoy el periódico.

"Estamos hablando de más US$1.560 millones, que es lo que valdría la empresa si no hubiera sufrido todas esas tropelías", agregó el gerente de la empresa al referirse a la suma por la que podría demandar al Estado argentino ante el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), dependiente del Banco Mundial.

Asimismo, el directivo de Marsans expresó su confianza en que el gobierno español defienda los intereses de la empresa ante Argentina, al sostener que "no se va quedar de brazos cruzados" en la disputa.

Por su parte, el presidente del bloque de diputados del Frente para la Victoria (FPV, peronista) oficialista, Agustín Rossi, consideró que "el gobierno tiene elementos como para reclamar (un resarcimiento) al grupo Marsans".

Asimismo, una fuente gubernamental confirmó a "Perfil" que si bien el gobierno va a litigar para que Marsans asuma sus responsabilidades sobre el pasivo de US$890 millones de las compañías, el Estado se hará cargo de las deudas una vez estatizadas.

"Es mayoritariamente deuda con el Estado y si dejábamos que la empresa quebrara, la perdíamos de todas formas", indicó el funcionario.

El viernes, la Justicia argentina intervino las compañías aéreas por un pedido del Ministerio de Planificación, lo que permitirá al Estado administrarlas hasta que sean expropiadas, tal como recomendó el Parlamento.

La posible expropiación es consecuencia del fracaso de las negociaciones de estatización de las compañías.

El Estado argentino y el grupo Marsans no llegaron a un consenso sobre el valor de Aerolíneas y Austral.

El Tribunal de Tasación de la Nación había fijado un valor negativo de US$622 millones para las compañías, por lo que el gobierno argentino propuso el pago simbólico de un peso para estatizarlas.

Esta propuesta fue rechazada por Marsans, que argumentó que la financiera Crédit Suisse cotizó el patrimonio en unos US$450 millones.

Según la ley para renacionalizar Aerolíneas Argentinas y Austral, el valor de la tasación debe ser aprobado por el Congreso en Buenos Aires.

Aerolíneas Argentinas y Austral fueron privatizadas a principios de los años 90 durante el gobierno del peronista Carlos Menem (1989- 1999) y adquirida por Iberia, pero luego fue pasando de manos por problemas administrativos hasta que en 2001 quedó bajo control de Interinvest, del grupo Marsans.

En los últimos años la aerolínea de bandera volvió a entrar en una crisis financiera, a la que sumaron problemas gremiales, por lo que el Estado argentino se hizo cargo en los últimos meses de los gastos operativos para que la compañía pudiera seguir volando.