Royston Drenthe, jugador holandés del Hércules de España, protagonizó un grave incidente el jueves pasado, cuando manjeó a 180 kilómetros por hora su Audi Q7 y se pasó seis luces rojas con la excusa de llevar a un amigo grave al hospital, aunque el problema de su acompañante era sólo que estaba ebrio.

Tras el partido con el Málaga, por la Copa del Rey, Drenthe condujo a gran velocidad por Alicante, como informa el diario Marca, porque según declararía después, trasladaba a su acompañante en estado grave a la Clínica Vistahermosa, aunque después se determinó en el centro médico que la persona que le acompañaba iba ebria, pero no en coma etílico.

Al jugador le molestó la presencia de la policía en el centro médico y, según relata el diario As, discutió fuertemente con los oficiales. a quienes calificó como mierda y que no servían para nada. También habría amenzado con llamar a sus jefes.

Al final, Drenthe fue castigado por conducción temeraria, se le retiró el vehículo y se levantó un de acta por desobediencia leve.

Drenthe, que dio negativo en el control de alcoholemia, dijo desupués estar arrepentido y explicó que "estaba nervioso y preocupado por la persona que había llevado y puede que hablara mal. Lo siento mucho, de verdad".

En Hércules están analizando si el jugador merece una sanción interna.