Los habitantes de la ciudad de L'Aquila, capital de la región de Los Abruzos, recuerdan hoy el terremoto que sacudió la zona el 6 de abril de 2009 y que provocó la muerte de 308 personas, 1.600 heridos y miles de desplazados.

Por ello, la ciudad conmemora el primer aniversario de la catástrofe con dos días de luto, que comienzan hoy.

El sismo, de una magnitud de 5,8 grados en la escala Richter, se registró a las 03.32 hora local (01.32 GMT) entre la madrugada del 5 al 6 de abril cuando la población dormía y, el centro histórico de L'Aquila o poblaciones como Onna quedaron prácticamente en ruinas.

Durante la primera jornada de conmemoración, se inauguró con una misa la estructura provisional que acogerá la iglesia de San Bernardino, en la Plaza de Armas de L'Aquila.

Todas las ceremonias de recuerdo de la tragedia se desarrollarán con sobriedad, solamente a base de velas y antorchas.

Serán precisamente las antorchas las que iluminen esta noche la Plaza de Duomo, donde a la hora que ocurrió el terremoto se leerán todos los nombres de las víctimas mientras repiquen las campanas de la iglesia de las Almas Santas, abierta al culto recientemente.

A las cuatro de la madrugada se celebrará una misa en la Basílica de Collemaggio.

Aunque el centro histórico de L'Aquila permanece aún precintado por peligro de derrumbe, los miles de desplazados que en un principio fueron alojados en tiendas de campaña ya han sido ubicados en casas prefabricadas.

El jefe de Protección Civil, Guido Bertolaso, dijo hoy que "ninguno ha sido abandonado o dejado solo. En estos doce meses se ha hecho mucho: la reapertura del año académico, la universidad y la posibilidad de dar una casa confortable a una decenas de miles de personas".

Para recabar fondos de los países más poderosos, el primer ministro Silvio Berlusconi trasladó a L'Aquila la cumbre del G8 el pasado julio cuando en un principio, la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno estaba prevista que se celebrara en la isla italiana de La Magdalena, próxima a Cerdeña.

Y la tierra no deja de temblar en Italia, un seísmo de magnitud 3,1 en la escala de Richter se registró anoche a las 23.16 hora local (21.16 GMT) en el Valle de Aosta, situado en el norte del país), mientras que una réplica de 2,0 grados se sentía veinte minutos después de medianoche en Messina (Sicilia).