El año 2008 fue atípico para el cine chileno: concentró la mayor cantidad de estrenos de su historia, pero también sufrió una baja en su asistencia. Es como si ante tanta oferta, el público haya operado con un criterio de selección brutal, asistiendo sólo a contados estrenos. La parrilla 2008 fue tan abultada que incluso varias cintas aplazaron sus exhibiciones para el 2009. Justamente éstas son la punta del iceberg de los estrenos chilenos del 2009, que al menos reúnen 12 películas de todos los estilos, del drama al horror, pasando por la comedia negra.

En este panorama, de lejos la obra que más llama la atención por su trama y elenco es Isla 10, el largometraje de Miguel Littin basado en la novela homónima de Sergio Bitar. La película relata la historia de ex altos funcionarios de la Unidad Popular relegados en Isla Dawson en 1973 y reúne a varios actores conocidos. Benjamín Vicuña lidera el elenco como Bitar, al que lo secundan Francisco Reyes en el rol de Orlando Letelier, Pablo Krögh como José Tohá y Cristián de la Fuente en el papel de un teniente. La película se encuentra en su fase final de rodaje y septiembre del 2009 será en principio su mes de estreno.

REINCIDENTES
En una categoría muy diferente se ubica Turistas, la segunda película de Alica Scherson (Play), que pretende exhibirse entre marzo y abril del 2009. La obra también es de las rezagadas del 2008 -se iba a estrenar en el Festival de Valdivia- y tiene a Aline Kuppenheim en un drama intimista, ambientado en un parque nacional cerca de Rancagua. Hasta ahí llega su personaje, tras una seria discusión con su esposo, encarnado por Marcelo Alonso. También actúa Diego Noguera, hijo de Héctor Noguera.

El drama también marca el clima de Navidad, la nueva cinta de Sebastián Lelio, responsable de la elogiada La sagrada familia. Ahora el realizador recorre las vidas de tres muchachos a la deriva -uno de ellos, personificado por Manuela Martelli- que se juntan durante la noche de Navidad. El filme irá en el primer semestre del 2009 y su presupuesto asciende a 500 mil dólares, bastante más que la modesta ópera prima de Lelio.

En el terreno del debut destaca Cristián Jiménez, director valdiviano que ambienta su comedia negra Ilusiones ópticas en esa ciudad. La cinta, que se estrenará en principio en marzo, tiene en el elenco a Alvaro Rudolphy, Valentina Vargas y Gregory Cohen, protagonistas de tres historias que implican a un guardia de mall, un funcionario estatal que trabaja en un taller sobre el desempleo y un ciego que recupera la vista.

AUGE DEL MINIMALISMO
El director Nicolás Acuña (Cielo ciego) lanzará su cuarto largometraje también en el 2009, esta vez con una trama minimalista acerca de un muchacho (Antonio Campos) que viaja al norte a reunirse con su madre. El protagonista de Ausente es hijo de Claudia di Girólamo y Cristián Campos y en el filme tiene una pequeña aparición este último.

Siguiendo el mismo camino íntimo -aunque ya sin actores profesionales- se ubica Huacho, el debut de Alejandro Fernández. Se trata de una película que, como El cielo, la tierra y la lluvia, fue beneficiada por varios concursos internacionales -de los festivales de Berlín y Rotterdam, entre ellos- y que transcurre en el campo, cerca de Chillán, relatando una historia de varias generaciones. Se espera estrenarla en el primer semestre del 2009.