En vísperas de la final del concurso televisivo "Britain's Got Talent" surgieron preocupaciones por el estado de salud de Susan Boyle, la escosesa que saltó a la fama a sus 48 años por su extraordinaria voz.

Los medios británicos informan hoy que la desempleada ha debido ser aislada para protegerla de la excesiva publicidad y los persistentes fans. Los organizadores desmintieron, sin embargo, los rumores acerca de que Boyle no se presentará mañana en la final a causa de la fuerte presión externa.

Boyle está recibiendo el apoyo que necesita. "Quiere concentrarse únicamente en su presentación. El bienestar de nuestros participantes es para nosotros lo más importante", dijo una portavoz.

La mujer se hizo famosa en abril en su primera presentación por asistir al concurso en ropa normal de calle y un peinado anticuado, pero dejó a los escépticos jurados fascinados en cuanto comenzó a cantar "I Dreamed A Dream", del musical "Los miserables".

Reunió además en Internet una enorme comunidad de fans. El video con su primera presentación colgado en YouTube fue visto hasta ahora más de 60 millones de veces. El sábado pasado se clasificó para la final del concurso esta semana.