Elaborar mapas con prioridades de protección contra incendios forestales; crear planes regionales para prevenir siniestros en los bosques y acceder a cualquier fuente de agua, natural o artificial, para abastecer equipos durante el combate del fuego.

Esas son algunas de las obligaciones y atribuciones que incluye el proyecto que crea el Servicio Nacional Forestal, iniciativa que nació tras los incendios que afectaron la zona centro-sur del país durante enero y febrero de este año. Este servicio reemplazará a la Corporación Nacional Forestal (Conaf).

El texto, que ya ingresó al Congreso, estipula que la nueva institucionalidad será "un servicio público, descentralizado, con personalidad jurídica y patrimonio propio, sometido a la supervigilancia del Presidente de la República a través del Ministerio de Agricultura".

La misión del servicio, señala la iniciativa, será la conservación, protección, manejo y uso sustentable de "las formaciones vegetacionales del país y de los componentes de la naturaleza asociados a éstas".

En ese contexto, el proyecto establece que "impulsará el uso sustentable, manejo, fomento, protección y conservación de tales recursos, así como el desarrollo de emprendimientos económicos destinados a la producción de bienes y servicios basados en el uso de tales formaciones, de manera sustentable".

Asimismo, se precisa en el texto que mientras no entre en funcionamiento el Servicio de Biodiversidad y Areas Protegidas, este organismo "mantendrá temporalmente las atribuciones en materia de conservación de la biodiversidad, dentro de las áreas silvestres protegidas".

Pero lo más relevante dice relación con el combate de incendios. En ese sentido, el Ejecutivo propone "ejecutar políticas y programas de protección contra incendios forestales en formaciones vegetacionales y en zonas de interfaz urbano-forestal". Ello, con participación ciudadana, "para lo cual podrá coordinarse con municipios, juntas de vecinos, organizaciones no gubernamentales, empresas, organizaciones de voluntariado, entre otros".

La nueva entidad deberá velar, además, por "la reforestación o restauración de las formaciones vegetacionales y de las zonas de interfaz urbano-forestal dañadas por incendios".

Respecto de su composición, la iniciativa señala que el organismo estará afecto al Sistema de Alta Dirección Pública y que sus funcionarios se regirán por el Código del Trabajo.