Todo comenzó cuando la Universidad de Iowa se aventuró y extendió los cupos de admisión para el año 2010.

Un incremento de oferta para atraer a nuevos alumnos que se les fue de las manos. La cantidad de estudiantes matriculados en el semestre académico norteamericano excede la capacidad de infraestructura del plantel.

Mientras los nuevos estudiantes buscan dónde vivir y tratan de acceder a los cursos más populares del plantel, la casa de estudio se enfrenta con un exceso de demanda que aún no sabe cómo resolver.

Según el New York Times, el exceso de matrículas corresponde a más de 400 de las que se concluyeron en 2009, cerca de un 10% más.

La mayoría de los jóvenes inscritos proviene de sectores lejanos de Iowa, incluyendo a alumnos de China e India. Por ahora, señaló el medio norteamericano, los estudiantes se la están arreglando para ver dónde vivirán y cómo accederán a las clases que querían.

Ante la sobre llegada de los nuevos alumnos, la universidad ha convertido salones y comedores en salas de clases y dormitorios improvisados.

"Es bueno y malo", dijo Tom Rocklin, un encargado de Servicios Estudiantiles de la U. de Iowa. Según la autoridad, harán lo posible para garantizarles a los estudiantes las clases que necesitan.