Acuerdo en transporte aéreo

SEÑOR DIRECTOR

En relación a la opinión expresada por la ministra de Transportes sobre el acuerdo de precios entre Latam y sus principales competidores, sorprende que la autoridad se manifieste a favor de esta medida, a pesar de que le preocupa que se produzca una concentración de mercado que pueda perjudicar a los pasajeros.

La fusión aprobada implica que las líneas aéreas participantes controlarán el 78 % del mercado de Chile a Norteamérica, 64% del mercado de Chile a Europa, 74% del mercado de Chile a Sudamérica y 70% del mercado doméstico de Chile.

También se equivoca la ministra al sostener que su aprobación sea "una tendencia de la industria".

Primero, el acuerdo de precios que aprobó el TDLC, entre Latam, American Airlines, Iberia y British Airways, todavía no ha sido aprobado en Estados Unidos y tampoco en la Comunidad Europea. En otros (como Uruguay), sólo se autorizó como una modalidad de "códigos compartidos", pero no con la posibilidad de fijar conjuntamente precios, capacidad, frecuencias de vuelos ni repartirse utilidades, como ha ocurrido en Chile.

Segundo, los países donde este acuerdo de precios sí ha sido aprobado tienen realidades radicalmente distintas a Chile, por lo que no son comparables. Por ejemplo, el acuerdo que autorizó Brasil y Colombia, afectaría entre un 17% y 30% del mercado respectivamente.

Tercero, últimamente la posición de las autoridades internacionales frente a estos acuerdos ha sido contraria a lo señalado por la ministra. El año pasado en Estados Unidos, la autoridad manifestó su rechazo a un acuerdo de precios idéntico al aprobado por el TDLC, que pretendían celebrar American Airlines y Qantas Airways para repartirse la ruta entre Australia/Nueva Zelanda.

Además, según publicó la reconocida revista The Economist, estos acuerdos han incrementado significativamente las tarifas, en directo perjuicio de los consumidores, del comercio exterior y del turismo.

Lorena Arriagada

Secretaria general ACHET