Pulso

De pipeños y pipeños

En la semana del aniversario de nuestra independencia, corresponde hablar del vino más chileno de todos, el pipeño. La mayoría de la gente lo asocia con el blanco que se usa para preparar el popular “terremoto”. Sin embargo en este caso el vino es solo un ingrediente más en una mezcla bastante sui generis, donde el azúcar siempre prevalece. Por lo general, los pipeños utilizados para este trago son blancos y en la mayoría de los casos -lo digo con mucho respeto-, de muy mala calidad. Sin embargo, debo aclarar que este verdadero y gran vino nacional es un excelente compañero para estas celebraciones, cuando se ha hecho con el debido cuidado y respeto.

Los buenos pipeños son un patrimonio de los valles del Maule e Itata, generalmente hechos con uva País en su versión tina. En algunos casos, sobretodo en Itata, es común que lleven algo de Cinsault, una cepa típica de este valle. Por su parte, los buenos pipeños blancos suelen ser hechos con las variedades moscatel y corinto, aunque también se encuentran otras cepas. Además de estas nobles cepas, lo primordial es el orgullo y esmero con que se sigue desarrollando la tradición de fabricar el pipeño en estas zonas, utilizando  técnicas que han sido transmitidas de generación en generación, preservando así nuestra cultura campesina en estos viñedos centenarios.

Los pipeños del Maule e Itata son vinos de carácter más gastronómico, hechos para el asado, la cazuela,  el costillar, el pernil y el arrollado. Son fáciles de tomar, muy jugosos y refrescantes, la fruta fresca siempre presente, acompañada de una rica acidez y con una cierta rusticidad de taninos. En el caso de los blancos, el moscatel aporta notas aromáticas muy particulares y seductoras. En el fondo, los pipeños son vinos jóvenes, ideales para acompañar nuestras preparaciones típicas y calmar la sed.

Por si no lo sabe, un pipeño es un vino que, luego de su fermentación, ha sido guardado en “pipas” o cubas de madera de raulí, como dicta la tradición chilena. En otras palabras, el único factor común entre este tipo de vino es su reposo en madera y nada tiene que ver, como muchos piensan, con el tipo de fabricación o las cepas que se utilizan. Aún así, existe una gran diferencia entre los distintos ejemplares de pipeño. ¡Salud y buen 18!

*Gerente Viña De Martino Wine MBA Bordeaux Management School.

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