Efectos del temporal en la agricultura: daños en infraestructura y cultivos, pero gremios no ven de momento alzas de precios en productos

Según el sector, el mayor problema ha estado en la regiones Metropolitana y de O’Higgins, hacia el poniente de la Ruta 5 y principalmente en los cultivos aledaños a los ríos. Cerezos, paltos, zanahorias, alfalfa e incluso viñedos han sufrido por las inundaciones.


”No se justifica bajo ningún punto de vista la especulación o alza de precios, por lo que ningún comerciante debería aprovecharse de esta situación”. El tajante juicio es de Antonio Walker, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA), sobre lo que podría pasar en las próximas semanas con respecto a los precios de frutas y verduras, debido al fuerte temporal que ha afectado a la zona centro-sur del país, enfatizando que las ferias libres, mercados mayoristas y supermercados están abastecidos de productos.

Según el análisis previo del sector agrícola, el territorio afectado para esta industria comprende desde la Región de Valparaíso, hasta la de La Araucanía, pero al poniente de la Ruta 5. Y las zonas más complicadas son Talagante, El Monte, María Pinto en la Región Metropolitana), así como Coltauco, Doñihue y San Vicente, en la Región de O’Higgins, principalmente en los cultivos cercanos a los ríos principales. Pero hay varias otras zonas que no se han visto con problemas graves respecto a sus cultivos.

“Lo más afectado son los huertos que están bajo mucho lodo, producto de los desbordes que no veíamos desde los ochenta. Hay algunos donde se había invertido cerca de US$75 mil por hectárea y ahora están con pérdida total. Principalmente de cerezas, cítricos, paltos y algunas viñas”, explica Walker.

Para hacerse una idea, desde el 19 al 25 de junio, la mayor cantidad de agua caída en la Región Metropolitana está en Pirque, con 116,2mm. Mientras que en la de Valparaíso, se ubica en Los Andes (118,8mm) y en la de O’Higgins está en Malloa (140,9mm). Más al sur, en el Maule, las principales precipitaciones se registraron en Longaví, con 278mm. En la del Ñuble estuvo en San Ignacio (248,5mm) y en la del Biobío en Antuco (104,8mm). En tanto, en La Araucanía, se ubica Villarrica, con 125,8mm, en primer lugar.

Iván Marambio, presidente de la Asociación de Exportadores de Frutas de Chile AG (Asoex), indica que en cuanto a la fruta de verano, ya se encuentra todo cosechado, y que sólo en algunas zonas bastante puntuales hay fruta de invierno como cítricos, cuya cosecha se ha interrumpido debido a las condiciones del tiempo. Por lo cual, no habría daño directo en la fruta, pero sí se están analizando los problemas en los huertos debido a inundaciones y barro. “Se podrá evaluar de mejor manera el impacto en el transcurso de los próximos días”, dice Marambio.

En todo caso, desde Asoex también señalan que no debería haber aumentos en los precios de las frutas.

“Hay que aclarar que los cultivos que están lejos de los ríos no han tenido problemas, así como los huertos que están en receso en esta época”, comenta, por su parte, Jorge Valenzuela, presidente de la Federación de Productores de Fruta de Chile (Fedefruta), quien agrega, eso sí, que “cerca de los afluentes ha habido muchos daños. Lo más complejo es para los cítricos y paltos que se pudren muy rápido si están en el agua, principalmente estos últimos. Hemos visto problemas también en viñas y una de las cosas más impresionantes fue un campo de 25 hectáreas de cítricos que fue totalmente arrasado por un río”. Pero también insiste en que, “como sea, esto no traerá un alza en el precio de las frutas”.

Infraestructura

Pero más que los cultivos en sí, desde este sector están preocupados por el daño de la infraestructura. Por un lado la pública, como puentes, caminos y carreteras y, por el otro, la que usan los mismos agricultores, como bombas de riego, casetas de riego, maquinaria y riego tecnificado, entre otros elementos. De hecho, un sondeo rápido de Fedefruta a sus asociados arrojó que un 67% de los productores entre las regiones de O’ Higgins y del Ñuble tuvieron daños en sus predios o instalaciones. Por ejemplo, la encuesta indicó que en una zona de 10 hectáreas cercanas al río Tinguiririca, se produjo pérdida total de cultivos de zanahorias, bunching y alfalfa, más la perdida de líneas, cintas y layfa para el riego de los cultivos.

“Los daños dependen mucho también de la canalización de cada zona. Cuando esta está organizada y bien administrada por las juntas de vigilancia, no hay problema. Por otro lado, si tuviésemos más inversiones hidráulicas y embalses chicos, podríamos ser capaces de contener agua para la seguridad de la población, agua potable y agricultura”, enfatiza Valenzuela.

Al respecto, desde Asoex su presidente indica: “Nuestra primera preocupación está en el bienestar de las personas, pero también nos preocupa el daño en la infraestructura de acumulación de agua y riego, como canales y tranques. Se han debido cerrar las bocatomas y canales por el exceso de caudal, pero no -en todos los casos- ha sido suficiente para evitar que el nivel aumente afectando el canal y a las personas que viven en sus alrededores”, sostiene Marambio.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.