La lista de convocados al primer disco de tributo a Achtung baby, veinte años después de su edición, hace creer que no era necesario ser fan de U2 para participar. ¿Qué hace aquí, si no, Patti Smith, quien en algún momento le dijo a Bono "jódete" y "estúpido" en una ceremonia de premiación (llenando de vergüenza al cantante, declarado fan de la poetisa rockera)? Achtung baby fue una publicación tan importante y bien pensada, que cautivó incluso a los recelosos de los vaivenes sonoros e ideológicos del grupo de Irlanda. Sigue siendo un disco poderoso, fundamental para entender los años noventa y el cruce entre rock y electrónica. Y ha conseguido ahora un tributo a su altura, con devotos tan importantes como Nine Inch Nails, Garbage, Depeche Mode y Jack White (White Stripes). Sus versiones respectivas para "Zoo station", "Who's gonna ride your wild horses", "So cruel" y "Love is blindness" merecen la escucha repetida, por el ingenio y profundidad, pero nadie lo hace mejor que la propia Patti Smith con un cover seco, blusero y desafiante de "Until the end of the world". Es la cumbre de un tributo disparejo, como suelen ser estos proyectos, pero muy superior a la expectativa que uno podría tener.