Un viaje profundo a la brujería chilota: así es el nuevo largometraje de Christopher Murray

Luego de un exitoso paso por Sundance, este jueves 23 llegó a las salas de cine nacional Brujería, la nueva producción de Fábula basada en la persecución a un grupo de brujería chilota, La Recta Provincia. En diálogo con Culto, su director conversó acerca del proceso investigativo y las intenciones detrás del filme.


En enero pasado y por primera vez en el reconocido Festival de Sundance, el cineasta chileno Christopher Murray presentó su nuevo largometraje, Brujería. Acompañada del positivo recibimiento por parte de la crítica, la nueva ficción de Fábula, inspirada en el juicio a los brujos de La Recta Provincia realizado en Chiloé a fines del siglo XIX, se transformó en uno de los estrenos chilenos más esperados, y que finalmente llegó a las salas de cine locales este jueves 23 de marzo.

“La película es una inmersión a un pasaje inédito de la historia de Chile. Es una invitación a sumergirse en ese pasado que a veces no conocemos de un hecho documentado, cómo fue esa persecución a un grupo de brujería”, dice Murray, a través del diálogo con Culto.

Desde temprana edad, el director de cine se rodeó de distintos relatos que tomaban parte en Chiloé -lugar de origen de su abuela- y ya cuando su segunda ficción, El Cristo ciego (2016), estaba en su etapa final, comenzó a adentrarse cada vez más en la isla sureña hasta que dio con el caso de La Recta Provincia. “Tenía ganas de sumergirme en otro espacio y tratar de inaugurar quizás una nueva ruta (...) Ese caso me pareció fascinante. No solamente por lo inédito de la historia, sino también por tratarse de temas políticamente relevantes”.

La historia sigue: “Ya instalado en Quicavi, simplemente comencé a tocar puertas y recolectar historias. Me quedé un buen tiempo. Al inicio había una actitud más distante, pero lentamente cuando uno se mantiene, empiezan a aparecer los relatos y la confianza”. Fue ahí cuando Murray dice haberse decidido a hacer un nuevo largometraje y comenzó a darle forma.

Si bien en un principio el proyecto empezó como un trabajo solitario, Murray fue sumando nuevas caras. Pablo Paredes en el guión y la producción quedaría bajo Fábula. “Era desafiante y requería de un trabajo creativo y de producción importante. Se dio un trabajo colectivo con mucha libertad de crear y encontrar la película”.

Brujería sigue la historia de Rosa (Valentina Véliz), una niña huilliche de 13 años que ha recibido formación cristiana y sirve a una familia de colonos alemanes. Cuando su padre es asesinado por un alemán, la niña se refugia en sus orígenes indígenas y decide vengarlo, con ayuda de Mateo (Daniel Antivilo), líder de La Recta Provincia.

Con la creencia -en este caso en la magia de los brujos- de por medio, el estreno de Murray llega en paralelo a trabajos previos como El Cristo ciego y el documental Dios (2019). “Vengo de un entorno y búsqueda de lo espiritual desde aspectos muy tradicionales y muy poco tradicionales a la vez. Con muchos cruces. Eso creo que genera una fascinación con ese tema, siendo yo una persona no creyente. Pero lo sobrenatural, me interesa porque tiene un impacto muy real, en las comunidades, en uno mismo, en la cultura. Tiene una dimensión muy política”.

El director construye un relato en que el personaje de Rosa, se sumerge y se refugia en un espacio de magia nuevo para ella. “Me parecía fascinante la idea de mostrar este viaje de iniciación. Partir desde fuera, pero también ir ingresando a lo más profundo del corazón de la brujería para poder entenderla en ese ánimo de resistencia y empoderamiento. Solo se podía hacer de esa manera”, explica.

Un filme que según él también cuenta con un componente político que hace eco a conflictos contemporáneos y que incluso, va más allá de lo que ocurre en Chile. “Son las heridas abiertas de procesos de colonización, eso resuena. Ojalá la gente pueda conectar y reflexionar sobre esos elementos políticos y sociales que están sucediendo en nuestro entorno”.

De hecho, es eso mismo lo que según Murray logró que la película tuviera un buen recibimiento en el festival de cine estadounidense- donde compitió en la categoría de mejor película internacional-. “Los diálogos que se generaron eran justamente los que se buscaban provocar. Todos los países tienen algún caso donde las cosmovisiones se han visto en confrontación o persecución”.

Luego de su estreno en Sundance, el sitio de reseñas The Playlist escribió que el filme era “un crudo pero hermoso hechizo de venganza”. Crudeza que según Murray no podía ser omitido en esta historia, pero que a la vez es un tránsito hacia la calidez. “El hecho de cómo el Estado ejerce la colonización en ese lugar, y Rosa padece de esa violencia, pero desde ahí empieza a ingresar y tener un espacio de cuidado y cariño en el encuentro con La Recta Provincia”.

La llegada de Brujería a la pantalla grande este jueves marca el regreso a la ficción de Murray luego de su destacado paso por documentales como cofundador y director del proyecto MAFI, Mapa Fílmico de un País, una plataforma de documentales nacionales. Es ahí donde incluso ha colaborado con cineastas nacionales como Maite Alberdi.

Al preguntarle en qué género se siente más cercano hoy en día, Murray asegura que no los experimenta tan distintos en su realización e incluso le cuesta diferenciarlos. “Son procesos que siempre están ligados para mí a realidades y a territorios. Desde ahí emerge un ánimo más imaginativo, más especulativo o quizás más documental. Creo que responden a procesos que no son tan distintos. Sobre todo, porque en el documental igual está esa posibilidad de imaginar”.

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