Arte chileno contemporáneo de exportación

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Colección Engel. Se proyectaba para inicios del 2024 la apertura de NUMU (Nuevo Museo de Santiago), un museo especialmente dedicado al arte chileno contemporáneo. Inspirado por aquellos espacios que dialogan y se nutren de la vida de los parques, su ubicación será el extremo sur del Parque Bicentenario y su diseño surgirá de un concurso abierto para arquitectos chilenos. Mientras esa etapa queda pospuesta, hablemos del impacto que causó el viaje a Madrid de una parte de la colección que acogerá el museo , una muestra de lo que podrá ser.




A la inauguración de 'Gran Sur' -la exposición que llevó a Madrid parte de la colección que Claudio Engel viene formando hace seis años- asistieron más de 1.700 personas; fue la segunda más concurrida que Sala Alcalá 31 -un espacio de referencia para las artes visuales en esa ciudad- ha albergado en toda su existencia.

Tan significativo a modo de espaldarazo como esa inesperada asistencia fue lo que ocurrió el día anterior, cuando finalizaban el montaje: "Estábamos todos trabajando. De pronto llega la directora del museo muy nerviosa y dice: '¡Llegó José Jiménez!'. No tenía ni idea de quién era. 'Es solo el crítico de arte más importante de España', me explicó ella. 'No se asusten, sean cordiales, muéstrenle la exposición'. Cada domingo Jiménez critica cuatro exposiciones y parece que es muy exigente. Nunca da el máximo puntaje. Estábamos todos expectantes por lo que iba a decir este señor y el siguiente domingo se publica su reporte con la máxima puntuación. La misma guardia del museo decía: 'Ay, no, va a venir cantidad de gente ahora que este señor ha comentado bien'", cuenta María Pies, esteta y filósofa, directora de la Fundación Engel.

Textualmente Jiménez dijo: "Estamos ante una ocasión única: la posibilidad de ver la más amplia muestra de arte chileno que se haya presentado hasta ahora fuera del país de origen".

Desde ese 24 de febrero en que 'Gran Sur' abrió sus puertas -en el contexto de Arco, una de las ferias de arte más grandes en el mundo, como uno de sus eventos VIP- han aparecido más de 70 publicaciones en medios españoles; entre ellos, El País le dedicó doble página y en ABC salió cuatro veces. Paradójicamente lo que se ha sabido acá ha sido escaso. "Este crítico me decía que era emocionante para él apreciar este nivel de producción artística. Porque él sabía que existe, yo sabía que existe, pero el gran público no. No podía creer lo potente de lo que está pasando en Chile, la contingencia y urgencia que envuelve nuestro arte. 'Esto es espectacular, ¿cómo no se muestra más?', me decía".

Desde Juan Downey, pasando por Paz Errázuriz, Voluspa Jarpa, Enrique Ramírez, hasta Francisco Rodríguez y Pilar Quinteros; 89 obras realizadas por 37 artistas, básicamente el relato social y político que han construido en las últimas décadas, una realidad prácticamente inaccesible para los extranjeros, entraron a un container de 40 pies para llegar a Madrid. La organización de Alcalá 31 estuvo un año investigando, buscando una colección interesante para exhibir. Antes habían tenido en sus salas la de Hochschild de Perú, la de Eduardo Constantini -dueño del Malba de Buenos Aires-. "Entre ellos y nosotros nos pusimos de acuerdo en un curador externo a ambas partes. La tarea de seleccionar y leer nuestras obras recayó en Christian Viveros-Faune, un curador que vivió más de 40 años en Nueva York. Él asigna el nombre, el contenido y el relato de 'Gran Sur'", explica María. En total la colección Engel posee más de 800 piezas, de más de 140 artistas. 'Puertas', de Sebastián Preece, una obra que consiste en 57 puertas de la excárcel de Rancagua, por ejemplo, cuenta como una obra. Así hay otras piezas de gran formato, instalaciones, performance, videoarte y un largo etcétera. María Pies empezó a trabajar con Claudio Engel para formar esta colección hace cerca de seis años. La metodología es lo que más la diferencia del resto: "Normalmente las colecciones nacen como un relato personal del coleccionista, hay de por medio un gusto en particular. En cambio esta colección nace con la idea de ser abierta al público. La adquisición de las piezas fue completamente distinta.

Partimos haciendo una investigación en torno a losartistas de la generación de los años 90, posdictadura; posteriormente la colección creció hacia artistas de dictadura y posteriores, pero ese fue nuestro foco inicial". Quisieron saber quiénes eran, qué temáticas abordaban, dónde estaban sus obras. Siendo una generación tan heterogénea, tan marcada por el exilio, no era una tarea fácil. "Primero investigamos a los artistas, sus obras, y salimos a buscarlas. Respetando el trabajo que hacen los galeristas y el resto del medio, hemos tenido una relación muy cercana con los artistas. Hemos buscado con ellos obras que son importantes dentro de su producción artística. Hay artistas que nos han dicho 'mira, en realidad yo tenía una obra que se produjo a fines de los 80 y que está guardada y embalada en una bodega de mi mamá', hay que recuperarla y restaurarla. Otra nos dijo: 'En ese momento yo vivía en Holanda, tenía un coleccionista y él compró un óleo que para mí es muy importante', prácticamente tuvimos que repatriar esa obra. También hemos trabajado comisiones con artistas que nos han dicho 'yo tengo este sueño, que siempre he tenido en mi mente, aquí están los planos, pero no he podido ejecutarlo'. Han sido un sinfín de formas de colaborar con los artistas para que ingresen a la colección".

Los premios "A", entregado por la Fundacion Arco de España, son un prestigioso reconocimiento al coleccionismo y la contribución en la difusión del arte. Algunos de los premiados han sido la colección Cisneros, la Jumex, la de Alicia Koplowitz, la de Eduardo Constantini y la Paul Getty Foundation, entre otros. Este año por primera vez fue otorgada a un chileno, la colección Engel.

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EL MUSEO

Precisamente por estos días se iba a lanzar un concurso de mucho interés para los arquitectos nacionales. El ganador iba a diseñar el NUMU (Nuevo Museo de Santiago) -edificio que albergará la colección Engel-, a construirse en el extremo sur del Parque Bicentenario. Claudio Engel esperaba ver este sueño en pie a principios de 2024, pero en este momento las cosas no se ven tan claras. La única certeza que tiene es que seguirá con su plan de dejar un legado, y que en el futuro este quedará en las manos de sus hijos. "El arte siempre fue una atracción para nuestra familia. Esta colección parte buscando formatos que fueran museológicos, porque esa fue la meta desde el comienzo, donar un muy buen museo y poner esas obras ahí", explica Engel.

Si bien el nivel del Museo Precolombino le parece admirable, los referentes para su idea los ha encontrado en espacios como el Malba, en Buenos Aires. De hecho, dentro de la fase de preparación para abordar el proyecto se reunió con Constantini. "Realmente el que me fascinó se llama Crystal Bridges Museum of American Art, en Arkansas, fundado por Alice Walton, una de las dueñas de Walmart. Yo busco un museo en un parque porque creo que así tendrá una vida adicional, como ocurre con el museo de la Fundación L. Vuitton en París, y si te pones a pensar, el Met en Nueva York tiene parque alrededor también. Es mi obsesión".

www.fundacionengel.com

@lafundacionengel

"El material que está expuesto en España se envió un poco antes del 18 de octubre. Cuando lo vimos montado, después de tres meses, nos dimos cuenta de lo intuitivo premonitorio que es el arte, cómo todas esas obras anticipaban lo que iba a pasar", dice María Pies, directora de la Fundación Engel.

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