Jeep entra a la batalla familiar con el nuevo Commander

La firma norteamericana estrenó en Chile el SUV de tres filas de asientos. El precio va desde $ 37.990.000.




Un hito en la historia de Jeep. La firma de las siete ranuras busca aumentar su posicionamiento en el mercado nacional de los SUV y para eso sumó a su oferta local el nuevo Commander, el primer Jeep desarrollado íntegramente en Sudamérica.

Construido sobre la misma plataforma Small Wide del Compass, con quien comparte el origen brasileño, el Commander no solo es el más grande construido en la región, sino que además le permite a la compañía entrar en el segmento D de los SUV, destinado a familias más numerosas, ya que dispone de tres filas de asientos y capacidad para siete personas (con tres anclajes para sillas de niño).

Rival directo de modelos como el Kia Sorento y Mitsubishi Outlander, a los que se puede sumar el Subaru Evoltis y Honda Pilot, el objetivo de la marca es comercializar 500 unidades anuales en Chile.

Para llegar a esa meta, Commander dice tener fortalezas claras, comenzando con una personalidad propia en el exterior y sofisticadas terminaciones en el interior, lo que va de la mano con un buen equipamiento en tecnología y seguridad.

En su estética, tiene inspiración en el Grand Cherokee y toma elementos clásicos de Jeep, como las tradicionales siete ranuras que, en este caso van pegadas a los grupos ópticos con tecnología LED con indicación dinámica de giro, formando un frontal más amplio.

Por el costado, se mantienen los tradicionales pasos de rueda más cuadrados que enmarcan llantas de aleación de 19′'.

En la zaga, el nuevo Jeep Commander destaca por cuatro finas luces horizontales, una de ellos para la función de indicación de giro y los otros tres como luces de posición, luces que se encuentran unidas por barra satinada que atraviesa el portalón. Y como detalle del equipamiento que llegará al país (versión Overland) tiene techo negro y un sunroof panorámico de doble panel con comando eléctrico y blackout.

En el interior llama la atención el detalle de los acabados, buscando posicionar al Commander como uno de los vehículos más Premium de Jeep (como el Grand Cherokee). Así, destacan las butacas revestidas de cuero y gamuza color marrón, las costuras de los asientos con un tono cobrizo que se combinan con aplicaciones de la consola central y en el túnel de transmisión. Y como los detalles son los que importan, el apoyabrazos lleva grabado el año fundacional de la marca 1941).

El espacio interior es otro aspecto relevante del nuevo Jeep Commander. Con 4,77 metros de largo; 1,85 m de ancho; 1,68 m de alto y 2,79 m de distancia entre ejes, ofrece enorme habitabilidad para siete ocupantes, a lo que se suma la opción de que la segunda fila se pueda desplazar longitudinalmente hasta 140 mm, lo que permite más espacio para las piernas. Y para incrementar la comodidad, los respaldos de la segunda y tercera fila se pueden reclinar.

En cuanto a la capacidad de carga, hay 233 litros con todos los asientos arriba, pero llega a 1.760 litros si se abaten la segunda y tercera fila. Además, como una pequeña cajuela en el maletero, dispone de un espacio de almacenamiento extra de 31 litros.

La versatilidad que entrega el nuevo Commander va en paralelo con el equipamiento en tecnología que exigen las familias de hoy.

De esta manera, se encuentra el renovado sistema multimedia Uconnect de 5ª generación con pantalla táctil de 10,1″, la cual ofrece una nueva interfaz con mayor definición y más capacidad de procesamiento. Además, es capaz de conectarse de manera inalámbrica con los sistemas operativos de Android Auto y Apple CarPlay.

El tablero de instrumentos también es full digital, con una pantalla de 10,25′', donde se entregan diversas informaciones y es personalizable según el gusto del usuario

Por último, para completar la experiencia, el Commander dispone de un sistema de sonido Harman Kardon de alta definición.

Dos versiones motrices

El nuevo Jeep Commander se comercializará en dos alternativas en nuestro país, una a gasolina y una diésel.

El bencinero tiene un precio de $ 37.990.000 y se mueve por un motor T270, que dispone de una cilindrada de 1.3 litros turboalimentada que desarrolla 175 caballos de fuerza con un par 270 Nm a 1.850 rpm. Está asociado a una caja automática de seis marchas, con tracción 4x2.

La versión tope de gama, por su parte, tiene un valor de $ 43.990.000. Bajo el capot cuenta con el denominado propulsor TD380, un cuatro cilindros turbodiésel de 2.0L que entrega 170 caballos de fuerza con un par de 380 Nm. Está asociado a una transmisión automática de 9 velocidades.

Esta variante petrolera dispone de tracción 4x4 e incorpora selector de terreno con cuatro modos (arena, barro, nieve y automático), además de HDC (control de descenso de pendientes).

En capacidades, la marca indicó que tiene un despeje de 214 mm, además de 26º en ángulo de entrada, 22º en ángulo ventral y 24º en ángulo de salida.

Respecto de la seguridad, el nuevo Jeep Commander ofrece siete airbags y diversas asistencias a la conducción (ADAS) que van desde control de crucero adaptativo, alerta de colisión con frenado automático, detección de punto ciego y trafico cruzado, hasta alerta de cambio de carril, frenado de emergencia ante detección de peatones, ciclistas o motociclistas, detector de fatiga, reconocimiento de señales de tránsito y asistente semiautomático de estacionamiento.

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