Decidir qué auto comprar pasa por muchos factores, desde el estilo de auto, el tipo de transmisión y hasta la modalidad de combustible que le da la vida al auto. Hay algunos que prefieren un auto con motor a gasolina, sin embargo, hay otros que tienen tendencia a una propulsión a diésel.

Si bien los autos diésel son en casi todas las ocasiones, algo más caros que los bencineros, y también deben pasar por dos revisiones anuales, pero a largo plazo puede ser una buena opción económica para quienes recorrer varios kilómetros.

Te dejamos aquí algunas de las ventajas de tener un auto a diésel, y ojo, que no se te ocurra intercambiar los tipos de combustible porque te puede pasar ESTO.

1. El diésel tiene menor precio

Según indica el Servicio de Información en Línea de Precios de Combustibles En Estaciones de Servicio, en la Región Metropolitana, el combustible diésel es más conveniente para el bolsillo que la bencina. Comparando los precios entre las estaciones de servicio más baratas de la capital, diésel parte en $ 404, mientras que la bencina de 93 alcanza los $519.

2. Los autos a diésel tienen mayor torque

Para quienes disfrutan de la experiencia en la conducción, los motores a diésel pueden ser una buena opción.  Los modelos diésel, a pesar de tener la misma cilindrada que uno a gasolina, alcanzan el máximo de potencia con menor régimen de revoluciones. Un mayor par máximo que hace sentir más rápido el auto al pisar el acelerador.

3. Tu auto tendrá un menor consumo

Otra de las ventajas se refiere a durabilidad del estanque, en donde el motor a diésel gasta menos que uno a gasolina con la misma potencia. De esta manera, son más eficientes y rendidores, con un su consumo que disminuye la frecuencia de llenadas y, por consecuencia, aliviana la billetera. Las cifras estiman que puede mejorar el consumo entre un 20 y un 30%.