Bachelet en Venezuela: intensa agenda y custodiada por fuerzas chavistas

BACHELET
Michelle Bachelet arriba al Aeropuerto Internacional de Maiquetía, en horas de la tarde. Foto: Reuters

Cuando Michelle Bachelet abra la cortina de su habitación, en el hotel Eurobuilding de Caracas, tendrá una de las mejores vistas de El Ávila, la montaña al norte de la capital venezolana que la separa del mar. Allí se hospedará durante dos noches para la visita oficial como alta comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos , una cita esperada durante años por víctimas, familiares y defensores de DD.HH. venezolanos.

Después de meses de preparación formal, finalmente Bachelet aterrizó en Venezuela a las 16.44, según la cuenta de Twitter de Noticias ONU. La agenda que ha circulado entre los medios de prensa dice que después de ser recibida en el aeropuerto de Maiquetía, asistiría a una recepción oficial ofrecida por el canciller Jorge Arreaza en la Casa Amarilla, sede del Ministerio de RR.EE, en la Plaza Bolívar de Caracas.

Un largo jueves

Amanecerá y Bachelet se trasladará (7 kilómetros) desde el hotel Eurobuilding hasta la oficina del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en el piso 6 de la Torre Hewlett Packard, en la Avenida Francisco de Miranda, municipio Chacao.

Después de un corto encuentro en su oficina caraqueña, se trasladará (9,7 kilómetros) hasta la Casa Amarilla, donde está agendado un largo bloque de trabajo con altos funcionarios del gobierno venezolano: ministros, presidente del Tribunal Supremo de Justicia, Fiscal General, Defensor del Pueblo, entre otros.

Allí almorzará y desandará el camino hasta el PNUD a reunirse con representantes diplomáticos y, más tarde -ya casi de noche-, recibirá a representantes de la sociedad civil en el Centro Internacional de Actualización Profesional (CIAP), a poca distancia (2,5 kilómetros) del PNUD.

El CIAP pertenece a la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) y funciona al lado del Colegio San Ignacio, la escuela de los jesuitas en Caracas. El S.J. José Virtuoso, rector de la UCAB, es uno de los líderes del Frente Amplio, una organización que congrega a las fuerzas vivas -y otras un poco aletargadas- de la oposición venezolana.

https://www.latercera.com/mundo/noticia/una-venezuela-dividida-altas-expectativas-recibe-michelle-bachelet/705875/

Las ONG defensoras de derechos humanos tendrán allí su momento. "Nos estamos preparando porque hay muchas cosas que decir en muy poco tiempo", dice Susana Raffalli, nutricionista y consultora de Caritas que participará de estos encuentros y que en el mes de marzo trabajó, en el campo, con la comisión técnica previa a la participación de Bachelet. "Puedo asegurar la seriedad del equipo de Bachelet", dice.

Además de Caritas, están invitadas la Red de Observación Electoral de la Asamblea de Educación y otras asociaciones, como Acción Solidaria en VIH/SIDA y Cecodap, promotora de los derechos de los niños.

Carlos Trapani, directivo de Cecodap, asistirá al encuentro y lamenta que la visita sea tan corta. "Invitaría a Bachelet al arco minero del Orinoco, a los campamentos de El Callao y Tumeremo, para mostrarle el impacto de las actividades mineras en la vida de los niños", dijo Trapiani a Prodavinci.

Aunque cada uno de los interlocutores de la expresidenta tiene claro a dónde la llevaría si pudieran salir de las oficinas, la agenda no contempla acciones espontáneas.

También los ataques a la libertad de expresión serán un tema que se planteará a Bachelet. A una de las reuniones fue invitado el Instituto Prensa y Sociedad de Venezuela que denunciará los bloqueos sistemáticos a medios de comunicación digitales e independientes por parte de operadoras públicas y privadas, así como el sesgo de los medios oficiales.

Si en los más de 20 kilómetros de calles caraqueñas que Bachelet recorrerá este jueves pudiera sintonizar unos minutos varias emisoras de radio, podrá constatar que en ellas se transmite un solo mensaje: la voz de gobierno. Pero en vivo, alrededor de las mesas, escuchará otros tonos.

Viernes de protestas

Un flyer recorre los teléfonos y las cuentas de redes sociales de ONG y líderes opositores como Juan Guaidó: "El movimiento ciudadano venezolano convoca a la concentración #VzlaExigeDDHH". Se citan frente a las oficinas del PNUD, en la avenida Francisco de Miranda. Pero a esa hora Bachelet no estará allí, sino en el Palacio Federal Legislativo, sede de la Asamblea Nacional y de la Asamblea Nacional Constituyentes, dos instituciones que en el papel se anulan entre sí y en la práctica mantienen una áspera vecindad.

En la mañana se estima que Bachelet se reúna con la directiva de la Asamblea Nacional y con Guaidó. También con Diosdado Cabello, número dos del chavismo y presidente de la Asamblea Nacional Constituyente. La cercanía de la prensa a esa actividad está en duda: durante 2019 la Guardia Nacional Bolivariana ha impedido la entrada de los medios de comunicación al Palacio Federal Legislativo para cubrir las sesiones del Parlamento.

A mediodía, la alta comisionada volverá a la Casa Amarilla, a una cuadra del Palacio Federal Legislativo, para reunirse con actores sociales y sindicatos. Aquí podrá conversar con los miembros de la organización Víctimas de la Guarimba, un grupo que ha denunciado fallecimientos a causas de las protestas opositoras de 2017.

Si la protesta no se ha disuelto por el apetito del mediodía, la recibirá cuando regrese a la sede del PNUD a reunirse con la Iglesia y con víctimas y familiares de víctimas de violaciones de Derechos Humanos. Con el eco reciente de estas denuncias llegará a las 19.00 al Palacio de Miraflores, sede del Ejecutivo Nacional y despacho de Nicolás Maduro.

A las 21.30 dará una conferencia de prensa en el aeropuerto y pasadas las 22.00 emprenderá vuelo con millas y evidencias acumuladas.

Durante toda su visita, Bachelet estará resguardada por efectivos de la Guardia Nacional Bolivariana, la Policía Nacional Bolivariana, la Guardia de Honor y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin). Bachelet será escoltada en Maiquetía, en el hotel, en todas sus reuniones y hasta el momento de su partida.

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