En la cabaña de un bosque, en medio del silencio y alejados de la sociedad, un matrimonio busca sanar sus heridas: hace un año, su pequeño hijo murió de una forma terrible, cayó  de un ventanal mientras la pareja hacía el amor en su habitación. Y cuando ella alcanzó el clímax sexual, el pequeño suspiraba por última vez. Creyeron que volviendo a ese lugar, donde vivieron sus últimas vacaciones, podían empezar de nuevo. Pero lo que viene es un camino tortuoso, y el sexo es la única vía de escape.

Esta es la trama de Anticristo, cinta del controvertido director danés Lars Von Trier (59 años). Estrenada en 2009, es la primera parte de la Trilogía de la Depresión, que componen Melancolía (2011) y Ninfomaníaca (2013), a la que él mismo catalogó como "porno filosófico". Es protagonizada por Charlotte Gainsbourg, premio a Mejor Actriz en el Festival de Cannes por este rol, y Willem Dafoe.

A siete años de su estreno, la película es objeto de censura en Francia, país siempre respetuoso de la libertad de expresión: la justicia de ese país dictaminó que Anticristo no puede ser exhibida en su territorio, ni en salas ni en la TV.

El Tribunal Administrativo de París acogió la solicitud de Promouvior, una asociación católica fundada en 1996 por ex político de ultraderecha André Bonnet, de censurar el filme por su alto contenido sexual y violento. Al momento del estreno, el Ministerio de Cultura clasificó la película como no apta para menores de 16 años.  El fallo judicial indica que Anticristo tiene que tener una nueva clasificación para mayores de 18 años y, mientras no se haga el cambio, está prohibida su exhibición. El documento del fallo acusa al trabajo de Von Trier de "contener un complejo grado de representación de la violencia y de la sexualidad, y debe ser prohibida para los menores".

"Estamos contra los directores sin escrúpulos que aspiran a reintroducir la pornografía en los circuitos para el gran público", dijo André Bonnet al portal Allociné. Su organización ya había promovido este tipo de censuras al cine: el año pasado logró que censuraran La Vida de Adele de Abdellatif Kechiche, y ganadora de la Palma de Oro en Cannes, para mayores de 18 años (antes era no apta para menores de 12), y que clasificaran como no apta para menores a Love, de Gaspar Noé, otro polémico director francés y responsable de Irreversible, protagonizada por Mónica Bellucci.
 
 
El controvertido Lars Von Trier

Lars Von Trier es uno de los directores más polémicos de Europa. En el Festival de Cannes de 2011 fue declarado “persona non grata”, luego de hacer declaraciones pocos felices en torno a Hitler y los judíos. En esa oportunidad, dijo: "Comprendo a Hitler… creo que hizo algunas cosas malas, sí, pero simpatizo un poco con él. No fue lo que llamaríamos un buen tipo, pero lo entiendo bastante. Pero no estoy con la Segunda Guerra Mundial, y no estoy en contra de los judíos. Los aprecio mucho. Bueno, no demasiado, porque Israel es un dolor en el trasero. ¿Cómo escapo de esta frase? Ok, soy nazi". Luego de sus infortunadas palabras fue expulsado del festival.

Sin embargo, el realizador danés se ha convertido en una de los referentes del cine europeo actual, y es comparado incluso con el realizador sueco Ingmar Bergman.  Pero también se ha ganado una reputación de altanero y misógino. En los 90, creó el movimiento Dogma 95, con el que pretendía volver a la esencia más pura y cruda del cine, dándole mayor valor a las actuaciones y la historia, sin efectos especiales y con un nivel austero de producción.

“El cine es una pálida imagen de la realidad. Si lloras en una sala de cine, es una pálida imitación de una emoción similar que tuviste en la vida real. En este sentido, es un medio de segunda porque siempre se nutre de emociones que pide prestadas a la vida real”, dijo Von Trier después del estreno de Anticristo.

A través de 15 películas, Von Trier ha desarrollado un cine con un sello propio, a menudo áspero e incómodo. En el Festival de Cannes siempre fue protagonista con premios y nominaciones: Premio del Jurado por Europa (1991), el Gran Premio del Jurado por Rompiendo las olas (1996), y la Palma de Oro por Bailarina en la oscuridad (1996), protagonizada por la cantante Bjork. Y fue nominado a la Palma de Oro con Los Idiotas (1998) y Dogville (2003) con Nicole Kidman.