El Gobierno español pidió hoy "prudencia" ante la operación policial abierta contra ETA en Portugal e insistió en su objetivo de acabar con la violencia de la banda terrorista.

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, quien hizo estas declaraciones en la población de Santiago de Compostela, en la provincia de La Coruña, pidió cautela porque la operación "sigue sin cerrarse".

La vicepresidenta española insistió en el objetivo del Gobierno español en "acabar con la violencia" y "poner fin a ETA".

La Policía portuguesa anunció ayer el hallazgo de un piso en localidad turística de Obidos, al norte de Lisboa, supuestamente abandonado por miembros de la organización terrorista ETA, que albergaba media tonelada de explosivos y bombas listas para detonar.

Fernández de la Vega felicitó a las Fuerzas de Seguridad lusas por su "importante colaboración" en la lucha antiterrorista.

La Policía española busca a Andoni Zengotitabengoa Fernández y a Oier Gómez Mielgo como los dos presuntos miembros de ETA que habrían ocupado la vivienda localizada en Portugal.

La organización terrorista ETA reclama la independencia del País Vasco de España, y en sus más de 40 años de actividad armada ha asesinado a más de 800 personas.