Nadie duda que 2010, el año del Bicentenario, supone una ocasión inmejorable para revisitar nuestra historia, las tradiciones patrias y los personajes que dieron forma al carácter nacional.

La televisión no podía quedar fuera de la fiebre que despierta la efeméride y, sin dejar de lado la obsesión con el vampirismo o la licantropía que se ha apoderado de la pantalla en el último tiempo, ya anuncia con fuerza la programación de series y telenovelas "históricas".

Así, Martín Rivas, protagonista de la novela homónima de Alberto Blest Gana, tendrá una nueva versión televisiva. Según se apunta, será más "audaz" que la ya realizada hace un par de décadas. Algo similar ocurre con Manuel Rodríguez, quien también fue objeto de una teleserie "histórica" en los 80. En la versión actual, sin embargo, se le presenta no sólo como el osado libertador que fue, sino también como "el guerrillero del amor", lo que da algunos indicios sugerentes de para dónde va la cosa. También se prepara Adiós al Séptimo de Línea, inspirada en la novela de los años 50 que se originó, a su vez, en un radioteatro.

A más de alguno molesta el tono de estos programas, que ya han tenido un suculento aperitivo en la serie "Héroes", sobre distintos próceres de nuestra historia. Pero estos no son tiempos para escrupulosos. Hoy manda el rating y sin derecho a pataleo. Quien quiera historia de verdad, que lea un buen libro. Ahora, quien busque una mezcla de historia, picardía y, póngale también, algo de truculencia, que encienda la tele. (IIS)