Apolonia es la santa patrona de los dentistas y es el nombre del velero que comanda Jaime Charad. Él,  junto con sus dos hijos y una delegación conformada por navegantes de Brasil, España, Italia y Argentina, buscan volver a ganar el primer lugar conseguido en la Regata Chiloé de 2014, en la categoría Soto 40.

“Mis padres eran dentistas y además me inculcaron el amor por el mar. Yo seguí esa tradición y creo que funcionó”, dice Jaime. Además, con mucha precaución analiza el nuevo circuito y sus contrincantes: “Es complicado el tramo de este año, además la flota es muy competitiva porque se encuentran los mejores navegantes del mundo”.

La embarcación de la Apolonia nació como proyecto hace siete años. Entre sus fundadores estaba el   emblemático empresario Felipe Cubillos, quien originalmente lo iba a liderar. “Lamentablemente tuvo el accidente de avión y falleció antes que el bote llegara a Chile”, recuerda con  emoción Charad.

La Regata Santander Chiloé 2016 es difícil y el dentista lo tiene claro. Ya al momento de navegar desde Puerto Montt a Castro, su equipo sintió lo complicado que puede ser en términos de logísticas los desplazamientos. “Esta competencia se puede definir como mágica y fortuita, pero tenemos la esperanza de lograr un puesto en el podio de este año”, declara.

Apolonia junto a las otras 72 embarcaciones zarparon ayer a las 14:45 de Castro hasta Chonchi. Una partida falsa de los veleros retraso el primer tramo de la competencia que término en polémica producto de los resultados de este primer track de la regata.

Los jueces tuvieron que deliberar horas después del término del recorrido al ganador, y Entel, en la categoría Soto 40; Rufián en los J105; Supremo en Cruceros y Pura Sangre en los IRC llegaron en tiempo.