El año 2008 nuestra productora obtuvo por primera vez un fondo del CNTV con "Flipos", proyecto de animación preescolar que mostraba conceptos curriculares de la educación parvularia a través de un contenido animado.

Nuestro objetivo era utilizar la televisión abierta como una herramienta de entretención, educativa y cultural, y de apoyo a la formación pre escolar (un sector que hasta el día de hoy ha sido prácticamente ignorado).

En ese camino, hemos seguido realizando contenidos preescolares; obtuvimos nuevamente Fondos del CNTV para realizar "Muelín y Perlita" (2011) y nuestro próximo proyecto "Guitarra y Tambor" (2016), que será emitido por TVN.

En la columna publicada esta semana en La Tercera, el académico UC Fernando Acuña propone que los recursos del Fondo CNTV se destinen a "nuevos" programas de calidad y propone que este Fondo se entregue íntegramente a TVN para la realización del canal cultural, el cual ya tiene sus propios recursos asegurados en el proyecto de capitalización de TVN.

Lo que se propone es arriesgado, no sólo por la situación económica actual del canal, sino que además se limitaría la realización de contenidos de la producción independiente, quienes aportamos la -ya escasa- diversidad que se encuentra actualmente en televisión abierta.

El Fondo CNTV financia un promedio de 20 nuevos programas de calidad cada año, seleccionados por evaluadores externos en etapas de evaluación técnico financiera y evaluación de contenido y calidad artística, donde se entregan recursos en líneas programáticas que benefician al público infantil, a la realización regional, documental y de ficción.

Además de hacerle seguimiento a los proyectos para que se cumplan los objetivos que se proponen en la postulación y que los recursos sean invertidos exclusivamente en la realización de éstos. Este modelo tiene probada trayectoria y cumple con la generación de contenidos para que lleguen al público.

Sería ideal que todos esos contenidos fueran exhibidos por TVN y para eso se debe generar una coordinación a nivel de Estado, para que las líneas editoriales se complementen e incluso se integren bases del Ministerio de Educación y del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio y que de esta manera los recursos que invierte el Estado en generación de contenidos, puedan ser utilizados transversalmente para que la televisión pública vuelva a ser una herramienta educativa, cultural y de entretención, que represente nuestra identidad con aún más fuerza.

El modelo del Fondo Concursable que gestiona el CNTV asegura el acceso a recursos a productoras independientes, con una diversidad de voces y miradas de distintos realizadores, que enriquecen la pantalla y que solo se ve limitado por un presupuesto que ha estado congelado desde el 2010.

Ideas, historias y talentos sobran, lo que falta son más recursos y leyes que impulsen la industria audiovisual nacional en beneficio de los espectadores.