Una selección especial: mis regalos para las mamás

No es fácil regalarle algo original a nuestras progenitoras, sobre todo para los que tenemos más de cuatro décadas celebrando este acontecimiento. Sin embargo, con algo de esfuerzo se pueden encontrar algunas sandías caladas que nunca fallan.




A la hora del postre

Aunque mi madre prefiere beberlo como aperitivo y en una pequeñísima copa, lo cierto es que un vino dulce como el late harvest es muy recomendado para acompañar el postre. Junto a una tartaleta, un flan de leche, helados o hasta algún trocito de queso va muy, pero muy bien. Para esta ocasión recomendaría el late harvest de Misiones de Rengo, un vino con un dulzor muy suave, fresco y agradable.


Dulzor para todo momento

Las mujeres en general —y las madres en particular— tienen esa curiosa capacidad de poder disfrutar de los chocolates poco a poco. Viendo televisión, leyendo un libro o durante el trabajo pueden sacar solo uno o dos pequeños trozos de chocolate, disfrutarlos por un momento y luego guardar el resto del paquete para seguir con sus acciones. Realmente admirable. No como nosotros, que no descansamos hasta que vemos el fondo del envase. Así las cosas, unos chocolates siempre serán bien recibidos como regalo para el Día de la Madre. Por ejemplo, estos artesanales de la marca Prieto, hechos —y pintados— a mano, que vienen en un mix muy variado de sabores.


Para el cuerpo

No se comen ni beben sino que se usan como hidratante. Me refiero a las cremas corporales que las mujeres (y también hombres) usan. Y claro, ya no estamos en los tiempos de esos potes gigante de crema de cualquier marca. Ahora la cosa es más específica y delicada. Como por ejemplo, esta crema de aceite de palta sudafricana que más encima viene en un envase cien por ciento reciclado y a su vez reciclable, con su correspondiente certificación de Comercio Justo. Cualquier madre seguro lo agradecerá.


Para leer

Un libro también puede ser una buena opción para regalar este domingo a las madres. Dependiendo de los gustos de la persona a la que le haremos el regalo, siempre podremos encontrar algo que sea de su interés. Por ejemplo, este libro de la periodista Dalal Halabi, Cocina de la diáspora, donde muestra y explica una gran cantidad de recetas de inspiración palestina. Un libro que se disfruta tanto mirándolo como siguiéndolo a la hora de cocinar.


Para refrescarse

Puede ser leyendo un libro, comiendo chocolates o simplemente acompañando un momento de relajo al final del día. Lo cierto es que hace rato que el espumante dejó de ser una bebida asociada exclusivamente a celebraciones de fin de año y por lo mismo se puede disfrutar en cualquier momento. La oferta actual en el comercio nacional es extensa, pero acá les sugiero probar el Miguel Torres Cordillera Bru, que está muy bueno.


Simplemente irresistibles

Madres, abuelas, tías, parejas… nadie es indiferente a estas tradicionales galletas, alguna vez llamadas Galleta Amor: un verdadero vicio. Dentro de sus paquetes vienen algunas muy tostadas, otras un poco más otras y algunas en un punto medio. Unas más duras que otras, todas son irresistibles y de verdad que cuesta mucho hacer durar cada paquete. Un regalazo, siempre.


¿Un queso?

Otro regalo que una madre siempre agradecerá (a menos que sea intolerante a la lactosa) es un buen queso. Y cuando digo buen queso digo uno bueno, no esas cosas que muchas veces venden en el supermercado y que no son más que una burda mezcla de leche, suero y hasta papa (sí, papa). Entonces, si quieren regalar algo de calidad, tómense el tiempo y el dinero suficientes para hacerlo bien. Por ejemplo, eligiendo un camebert francés de nivel como el que aquí se muestra.


¿Un vermú?

Solito con hielo, con soda y una rodaja de naranja o en un Negroni. La verdad es que el vermú siempre viene bien, a cualquier hora y cualquier día. Así las cosas, vale la pena tener una botella en casa, siempre lista y dispuesta. ¿Qué vermú?, ya que estamos de celebración, puede ser uno artesanal y nacional como el Luther.


Porque siempre sirven

Y a todos les encantaría tener uno. Me refiero a los cuadernos Moleskine, tan lindos, sobrios y útiles, que hasta hace poco más de una década eran casi imposibles de conseguir en el comercio santiaguino. Afortunadamente, ahora hay hasta variedad de modelos y colores para elegir. Como por ejemplo el que aquí se muestra.


Potencia y sabor

Estamos claros que hace mucho que dejaron de existir esas clasificaciones de bebidas alcohólicas exclusivas para el público femenino. Hoy, simplemente, las mujeres beben lo que más les gusta, e incluso aborrecen esas preparaciones suaves y dulces (muchas veces con decoraciones en tonos rosa), que se supone estan pensadas para ellas. Por todo lo anterior, un whiskey Single Malt Glenfiddich es un excelente regalo para este domingo.


*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 4 de mayo de 2022. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.

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