El hombre que está venciendo a la mayoría de los gestores de carteras españoles le debe una de sus mejores ideas de inversión a un vino de mesa.

Iván Martín recorría la provincia española de La Rioja con su familia cuando se dio cuenta de que los lugareños que pedían vino tinto en las tabernas de las soleadas ciudades en la ribera del Ebro simplemente decían: “Ponme un El Coto”. Impresionado por la fuerza de la marca, levantó una botella y vio que la producía Barón de Ley, por entonces poco conocida. De vuelta en Madrid, investigó la empresa y descubrió que no sólo se sentía atraído por el vino: su hoja de resultados y sus acciones también eran seductoras. Así que compró acciones de la empresa. Esto fue hace diez años, cuando lideraba el equipo de renta variable de la unidad española de Aviva Plc. El precio de las participaciones de Barón de Ley ha subido más de un 100% desde entonces, y se encuentra ahora entre las mayores empresas en su fondo Magallanes Iberian Equity FI. El portafolio de 106 millones de euros (US$113 millones), ha ganado un 9% este año, mientras que el Ibex ha caído 9,5%. También ha superado a casi el 90% de los fondos equivalentes a lo largo del año pasado. Magallanes tiene una estrategia de inversión conocida como “value,“ en la que las acciones se eligen basándose en fundamentos corporativos y una valoración relativamente barata. Esta estrategia, que se ha rezagado en el mercado durante seis años, está viviendo un retorno.