Pese a todo lo que se ha comentado en las últimas semanas, el senador RN, José García Ruminot se siente confiado en que este año la discusión presupuestaria no tendrá como ingrediente extra las elecciones presidenciales y parlamentarias. Apuesta  a que  el gasto público será limitado, en línea con las cifras de la economía y los recursos recaudados por el Fisco. Cree, eso sí, que educación nuevamente será lo más polémico.

¿Cuál cree que será el tema a priorizar este año?

-Vamos a tener un presupuesto que no creo que vaya a crecer más allá del 4% con respecto a este año. Esto en razón de que los ingresos fiscales están bastante acotados tanto en los tributos como en el aporte que hace Codelco al presupuesto nacional.

¿Será limitado entonces?

-Vamos a enfrentar sin duda un presupuesto con restricción de ingresos y eso conlleva a que tengamos un presupuesto que también en materia de gasto sea más restrictivo en relación a los otros años.

¿En año electoral, un presupuesto restrictivo no dificulta llegar a acuerdo?

-Espero que el presupuesto sea despachado con un criterio técnico, pero al mismo tiempo es un instrumento político donde se expresan las prioridades del actual gobierno para el gasto de 2014. Espero un despacho expedito, que el Congreso Nacional tome decisiones que signifiquen tener un gasto público que se hace cargo de las restricciones presupuestarias que vamos a enfrentar y no tener un presupuesto que finalmente termine siendo expansivo y que haya que recurrir al endeudamiento para financiarlo.

Apuesta, entonces, por llegar a  consensos

-Espero que prime la seriedad y la responsabilidad frente al país, porque en definitiva si uno termina gastando más de los ingresos que se generan, al final hay que ir pagando la cuenta en los años posteriores y no creo que haya nadie ni ningún sector político que esté en disposición de ello.

Por sector, ¿habría alguna sorpresa en el aumento de gastos?

-Las prioridades serán las mismas: Educación, Salud, Obras públicas y Vivienda. Además, y de manera muy importante en el crecimiento de los presupuestos de las regiones. Todos estos años, y bajo la administración del presidente Piñera, han venido creciendo de manera muy significativa los aportes al Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) y de los recursos públicos entregados a decisión regional.

¿Prevé partidas conflictivas?

-Estos van surgiendo de las discusiones y análisis que se van teniendo durante la discusión del proyecto y tiene mucho que ver con la ejecución presupuestaria o las demandas de la ciudadanía. Creo que una vez  más educación va a ser quien se va a llevar gran parte de la atención. También está el tema de vivienda y lo que dice relación con reconstrucción;  hay mucho interés en conocer el nivel de avance y cuánto es lo que se requiere invertir en 2014 para completar las soluciones.

Y respecto a los recursos de libre disposición ¿en cuánto deberían fijarse?

-Dado que vamos a enfrentar un presupuesto restrictivo, pienso que va a estar en una magnitud de US$300 a US$450 millones. En todo caso, nada de ello es obstáculo para que el próximo gobierno pueda hacer un ajuste o pueda recortar gastos de otros ministerios.

Quizás esto provoque polémica, ya que puede haber cambio de administración...

-En realidad probablemente se va a hacer un poco de polémica en torno a este punto, pero ninguna administración podría sostener que los recursos que se le han dejado en el presupuesto de un año para otro ha sido obstáculo para que ellos cumplan con las principales medidas que han anunciado en su programa de gobierno. No creo que vaya a ver una dificultad de esa naturaleza.