Rueda aprueba su primer examen con Milad: Ahora prepara una Roja del norte y otra del sur

La reunión post primera doble fecha de Eliminatorias, entre Pablo Milad y Reinaldo Rueda. FOTO: ANFP

Pese a la pobre cosecha, el técnico convence por las buenas sensaciones que dejó Chile, pese a presentar varias caras nuevas y las numerosas lesiones. Su rol como formador entusiasma al nuevo presidente de la ANFP, que elabora un plan maestro que busca potenciar figuras de proyección. La idea es volver a Toulon el próximo año, con Sierralta a la cabeza.



El gol agónico de Radamel Falcao en el Estadio Nacional fue un mazazo para la selección chilena. Era vital sumar tres puntos de local ante un rival directo. Sin embargo, otra vez un pelotazo al área hizo sucumbir al equipo de Reinaldo Rueda, tal como en Montevideo, en la derrota ante Uruguay. La cosecha fue mala en este inicio de las Eliminatorias y el propio técnico lo reconoció. “Es lamentable no haber podido sumar mejor”, reconoció, visiblemente afectado por el empate con Colombia cuando la victoria estaba en el bolsillo.

Sin embargo, en la ANFP consideran que el técnico pasó la prueba. No es que haya felicidad y satisfacción por haber conseguido apenas un punto en dos partidos. No, para nada. Todos están conscientes de que era imperioso vencer a los cafeteros, pero la amargura del mal comienzo se borra con el buen sabor que dejó la actitud del equipo, el buen juego mostrado a ratos y que, pese a las numerosas e importantes bajas, se supo plantar con nombres nuevos y debutantes ante oponentes linajudos y superiores, en el papel.

En ese sentido, en la imagen que se exhibió en el Centenario y en Ñuñoa, el saldo es positivo. Se superaron las expectativas, sostienen en Quilín. Más allá de los discursos público, no había mucha fe en lo que pudiera hacer la Roja sin Claudio Bravo, Gary Medel, Guillermo Maripan, Erick Pulgar ni el renunciado Jean Beausejour. No obstante, con buenas y malas, con errores y aciertos, el bicampeón de América fue un conjunto competitivo en ambos encuentros.

Se trataba del primer examen de Milad a Rueda. El seleccionador contratado por Arturo Salah ahora estaba bajo la lupa del nuevo presidente de la ANFP, uno de los pocos que creía en serio que Chile tenía posibilidades de romper la historia de visita ante los charrúas. Quienes estuvieron en el Centenario cuentan que el timonel se fue furioso del estadio, tras el postrero tanto de Maxi Gómez. Dicen que el mandamás se molestó con la celebración de los directivos uruguayos y, obviamente, con el desempeño del árbitro paraguayo Éber Aquino. Y se lo hizo saber a los gritos en la zona de camarines, desvelan en la asociación.

Si bien el curicano lleva poco más de dos meses en la testera de Quilín, rápidamente estrechó lazos con el colombiano, con quien tiene una comunicación fluida y continua. Para el presidente, el trabajo de Rueda y el conocimiento que tiene de los jugadores jóvenes se vio reflejado en la cancha. Ayer, ambos se reunieron para evaluar y sacar conclusiones de la doble fecha de las Eliminatorias para el Mundial de Qatar 2022.

Una de las principales inquietudes de Rei es poder contar con todas sus prioridades para la próxima nómina, ya que en esta pasada no pudo tener bajo sus órdenes a Niklas Castro, delantero que juega en Noruega, ni a ningún elemento de la MLS, como el atacante Felipe Mora, por problemas de traslados. El colombiano espera que aquello no vuelva a ocurrir y se lo hizo saber al gerente de selecciones Ian Mac Niven, quien también estuvo presente en la reunión. Al DT le urge encontrar un reemplazante a Eduardo Vargas, quien no estaba considerado para esta doble fecha clasificatoria y quien parece definitivamente no convencer al entrenador, no solo por su comportamiento dentro de la cancha.

“Es bueno analizar en frío esta doble fecha, que fue en condiciones totalmente diferentes a lo que estábamos acostumbrados. Analizamos todos los procesos de traslados, hoteles, los cumplimientos de los protocolos que exigía la normativa nacional de cada uno de los países, y también las normativas que exigía la FIFA. En base a eso, también hacer un análisis técnico del rendimiento de los jugadores, tanto individual y como colectivamente. También analizamos los errores que se cometen y que pueden influir en el rendimiento”, dijo Milad.

“Hemos tenido una reunión de comisión técnica y administrativa. Se ha hecho una evaluación de la jornada anterior, frente a Uruguay y Colombia, y ya proyectamos lo que se viene ante Perú y Venezuela en todos los órdenes, tanto en lo que es la convocatoria, plazos, desbloqueo de jugadores internacionales, posibilidad de microciclos de liga nacional y adelantar todo el aspecto administrativo de estos juegos, tanto en calidad de local, como lo que significa nuestro desplazamiento a Venezuela”, comentó el seleccionador.

Una Roja del norte y otra del sur

Milad quiere aprovechar la experiencia que tiene Rueda en selecciones menores y en generar recambio, tal como lo hizo en Colombia, Honduras y Ecuador. Por eso, quiere poner el énfasis ahí, en el rol de formador que tiene el DT. Quiere explotar las características y cualidades que ofrece el nacido en Cali.

En ese contexto, existe un plan maestro que se trabaja silenciosamente en Quilín. Su ejecución está proyectada para diciembre, un mes después de la tercera y cuarta fecha de las Eliminatorias, y cuando el Torneo Nacional ya esté en la recta final.

¿De qué se trata? De hacer dos selecciones chilenas, del norte y del sur, conformada exclusivamente de valores jóvenes, de jugadores de proyección, con el objetivo de ir moldeándolos desde temprana edad.

La idea es comenzar a trabajar de lleno con las futuras promesas. La división por zonas obedece a una cuestión sanitaria, más que nada, para no repletar Pinto Durán. Las convocatorias no se harán en fecha FIFA y el plan incluye jugar partidos amistosos con otras selecciones que también quieran trabajar con jugadores de proyección.

Sierralta, un líder para Toulon

Las selecciones norte y sur constituyen la primera parte del plan. La otra es participar en el próximo Esperanzas de Toulon, un certamen donde Chile es bien mirado y en el que ha tenido buenas participaciones.

La intención es asistir al prestigioso torneo que se disputa en Francia con la Sub 23, con Francisco Sierralta como líder del equipo, más otros seleccionados que ya han sido convocados y cumplen con la edad.

El espigado defensa formado en Universidad Católica y que juega actualmente en el Watford de la segunda división inglesa dejó una grata impresión en Rueda y en la asociación, debido a la madurez que mostró, no solo en el campo, sino también en la convivencia en el hotel, a sus 23 años.

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