¿Dónde se pueden topar Brasil con Argentina? ¿Francia aparece en el horizonte? El fixture de ficción que ilusiona a Sudamérica

Las dos potencias sudamericanas ya están en los octavos de final del Mundial de Qatar. Primero fue Brasil el que aseguró su pase a la ronda de los 16 mejores, tras vencer a Suiza el lunes, gracias al golazo de Casemiro. Este miércoles fue el turno de Argentina, que ha ido de menos a más en el campeonato. El triunfo sobre Polonia, más allá del penal perdido por Lionel Messi, fue la mejor expresión futbolística del equipo transandino en la cita planetaria y terminó dejando a la Albiceleste como líder del grupo C.

Tanto argentinos como brasileños son las cartas que tiene la Conmebol para volver a conquistar el cetro más preciado del deporte mundial. No está de más recordar que hace 20 años que un elenco de Sudamérica no gana la Copa del Mundo. En Corea-Japón 2002, el Scratch de Luiz Felipe Scolari se convirtió en el monarca, derrotando a Alemania. Más allá de las posibilidades de uno y otro para conquistar el trofeo dorado, lo que genera cierta cuota de morbo es conocer si ambas selecciones pueden enfrentarse en Qatar.

¿Se puede dar una final entre Brasil y Argentina? ¿Qué tiene que pasar para producirse? ¿Se pueden encontrar antes? Acá trataremos de clarificar las dudas.

Lo primero que hay que tener presente es el cuadro de desarrollo del Mundial en su fase de eliminación directa. Las llaves de octavos de final implican cruzamientos de los grupos contiguos: el primero del A contra el segundo del B, el primero del B vs. el segundo del A y así sucesivamente. Argentina avanzó de ronda en calidad de líder del grupo C, por lo tanto su próximo rival será el segundo del D, Australia. El duelo será el sábado, a las 16.00 horas de Chile, en el estadio Ahmad bin Ali de Al Rayyan.

Brasil está clasificado pero aún no se determina su posición final en el grupo G. Este viernes tiene su último duelo de grupos, ante Camerún (16.00). Si el elenco de Tite finaliza como el primero de su zona, enfrentará en octavos al segundo del H el próximo lunes 5 de diciembre en el estadio 974 de Doha (el de los contenedores). Lo más probable es que se de este escenario, pero si Brasil llegase a ser segundo, jugaría el martes 6 en Lusail, el recinto de la final.

La única forma en que Brasil y Argentina caigan en el mismo lado del cuadro es que la Canarinha gane su grupo. Esto implicaría que solo se cruzarían en las semifinales.

Por contraparte, el escenario que albergaría la opción de una final entre ambos sería que Brasil fuese el segundo de su zona, para así quedar en el otro lado de las llaves. Tendría que perder con los cameruneses y Suiza vencer a Serbia superando la diferencia de goles de los brasileños.

Al ser primero del grupo C, Argentina evitó enfrentarse a Francia, uno de los cucos del certamen. Tiene un rival más accesible como Australia, que se instala en octavos por segunda vez en su historia (la anterior fue en Alemania 2006). Si el equipo de Lionel Messi avanza, su rival en cuartos será el vencedor de Países Bajos - Estados Unidos, el primer partido de la próxima ronda del Mundial (sábado, a las 12.00 horas).

Entonces, si Brasil termina primero del G, tendrá como adversario al segundo del H: Ghana, Corea del Sur, Uruguay o hasta Portugal (en menor medida). Esto se conocerá hoy viernes.

Hacia la ronda de los ocho mejores, el horizonte de Brasil se ve halagüeño. Para cuartos, su rival saldría de la serie entre Japón y Croacia. Los nipones dieron el golpe y quedaron líderes de la zona E. Mientras tanto, España se libró (indirectamente) de cruzarse con los colosos sudamericanos hasta una potencial final.

El panorama sería distinto y más difícil en el hipotético caso de que termine segundo en su zona. De suceder aquello, su rival sería el primero del grupo H, muy probablemente el Portugal de Cristiano Ronaldo. Además, tendría en el horizonte de semifinales a Francia o Inglaterra.

Pero cualquier tipo de elucubración quedará más nítida este viernes, cuando el cuadro de la Copa del Mundo quede completamente definido.