Salvini da por rota la coalición de gobierno y provoca una nueva crisis política en Italia

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FOTO: AFP

Las desavenencias entre los partidos de coalición, La Liga y el Movimiento 5 Estrellas, comenzaron desde que se instaló el gobierno en junio de 2018. Ahora se abren una serie de escenarios y es probable que en octubre los italianos vuelvan a las urnas.


Solo 14 meses después de que la coalición entre el partido La Liga, del ultraderechista Matteo Salvini, junto con el Movimiento 5 Estrellas (M5S), se instalara en el Ejecutivo, Italia enfrenta una nueva crisis política. Esta posibilidad tiene que ver con el propio Salvini, quien el jueves reclamó elecciones anticipadas en Italia e instó al primer ministro, Giuseppe Conte -quien no pertenece a ninguno de los dos partidos-, a que convoque al Parlamento para confirmar que el gobierno de coalición ya no es viable.

La drástica decisión de Salvini vino después de meses de luchas entre la Liga y sus socios de coalición, el M5S. La inmigración, seguridad, empleo, fiscalidad y ayudas sociales han sido solo algunas de las materias en las que ambos partidos han tenido fuertes roces. Sin embargo, otros dos factores terminaron por detonar el posible quiebre de la coalición. "La crisis se podía ver desde hace meses, muchas tensiones emergían entre el M5S y La Liga en muchas materias. El último episodio fue el tren de alta velocidad entre Turín y Lyon. Además, los resultados en las elecciones europeas fue un factor fundamental en la decisión de Salvini de tirar del enchufe del gobierno y provocar una crisis", explica a La Tercera el analista político italiano y autor del libro Fenómeno Salvini, Lorenzo Pregliasco.

El punto de quiebre

El miércoles el Senado debía votar sobre la moción del M5S para frenar las obras del tren de alta velocidad que este partido considera como un despilfarro. Sin embargo, la moción fue rechazada con el apoyo de la Liga, que se distanció de sus socios de gobierno, y que considera el proyecto como una obra estratégica para Italia. Salvini sostiene que existe una paralización del país: "Desde hace unos meses tenemos muchos NO. No a la autonomía, no al tren de alta velocidad, no a la reforma de la justicia, no a la investigación petrolera... un no, ok; otro, bueno, pero tres no; mi posición no es mantener paralizado al país. Para tenerlo paralizado, preferiría dar voz al pueblo italiano. Que los italianos digan lo que hay que hacer. No estoy aquí solo para sobrevivir", señaló.

Según Pregliasco, el apoyo que tuvo Salvini y su partido en las elecciones europeas de mayo lo habría impulsado a dar por rota la coalición, como aspiración para asumir eventualmente al cargo de primer ministro ante el alto apoyo con el que cuenta actualmente. En dichas elecciones, La Liga se convirtió en la primera fuerza política de Italia con el 24% de los votos. El M5S, en tanto, solo logró el 17%, y quedó en tercer lugar por detrás del partido demócrata de centro izquierda, que alcanzó el 23%. Los últimos sondeos en le dan a La Liga una intención de voto de 36% y podría sumar mayoría en una coalición con dos de sus socios conservadores: Forza Italia del ex primer ministro, Silvio Berlusconi, y Hermanos de Italia.

De hecho, Berlusconi pidió hoy a Salvini pactar una coalición antes de ir a las elecciones anticipadas. Ambos partidos, junto con Hermanos de Italia, ya habían pactaron para las pasadas elecciones generales de marzo de 2018 con un programa común, sin embargo, concurrieron por separado y luego no sumaron mayoría absoluta.

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Ante este escenario, Salvini presentó una moción de censura contra el primer ministro Conte. Con ello, el líder ultraderechista busca que el gobierno constate si sigue teniendo los apoyos necesarios o no. Pero el Parlamento ahora está cerrado por vacaciones, aunque la presidenta del Senado, Elisabetta Casellati, ya convocó a los portavoces de la Cámara Alta para el lunes, y se cree que la votación de la moción se celebrará cerca del 20 de agosto.

Si Conte -quien expresó en un comunicado que "no depende de él (Salvini) dictar los pasos de la crisis política"- no logra demostrar que tiene los apoyos, deberá presentar su renuncia al Presidente de Italia, Sergio Mattarella, quien podría disolver el Parlamento y convocar a nuevas elecciones para fines de octubre. Pero también se abren otros escenarios menos probables, como la formación de una nueva coalición con la misma composición actual del Parlamento, o designar un nuevo gobierno tecnócrata que tendrá un tiempo limitado para poder presentar en octubre la Ley de Presupuestos para 2020. La decisión la tiene Mattarella.

Por su parte, el viceprimer ministro y líder del M5S, Luigi Di Maio, dijo que estaba listo para regresar a las urnas porque "la Liga se ha burlado de los italianos".

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