Después de jugar el partido más largo de la historia ante Nicolas Mahut, el estadounidense John Isner se despidió hoy de Wimbledon tras caer fácilmente por 6-0, 6-3 y 6-2 ante el holandés Thiemmo de Bakker.

Las 11 horas y cinco minutos de batalla con el francés, durante tres días, terminaron por pasarle la cuenta al espigado jugador que no alcanzó a reponerse del cansancio físico y mental para avanzar a la tercera ronda del certamen.

Isner, cabeza de serie número 23 del tercer Grand Slam de la temporada, no opuso resistencia y cedió el enfrentamiento en apenas una hora y nueve minutos de juego.

Por su parte, Kim Clijsters avanzó a octavos de final del torneo tras vencer a la rusa Maria Kirilenko por 6-3, 6-3 en poco más de una hora, y podría verse las caras con su compatriota Justine Henin, quien tiene que derrotar a Nadia Petrova.

Las dos belgas llegaron a dominar el tenis femenino en una época hasta que ambas se retiraron. Hoy están de vuelta y podrían revivir la otrora rivalidad.