Comienzos y quiebres con el pasado: cómo viene astrológicamente marzo

El cielo ha tenido aspectos interesantes durante este verano, uno de los más intensos que hemos tenido durante años. Con una gran acumulación de planetas en Acuario, que no veíamos desde 1790, la energía nos está permitiendo cortar con patrones muy arraigados en nosotras y poder partir nuevas etapas de nuestra vida.




Acuario es un signo zodiacal de aire y fijo. Está representado por la idea de la rebelión con las normas, la originalidad y la conexión con la comunidad. Este signo es un gran reformador, pues nos permite reconocer qué ideas o creencias están obsoletas en la sociedad. Desde finales de enero, Plutón, el regente de Escorpio, hizo su segunda entrada en este signo luego de 250 años, para quedarse hasta 2044.

Plutón en Acuario estuvo presente por última vez entre 1778 y 1798, una época en donde se destronaron reyes, se crearon naciones independientes y la revolución industrial comenzó a asentarse en el mundo. La última vez que vimos a Marte, Venus y Plutón unidos en este signo fue en 1791, cuando se creó el banco nacional de Estados Unidos y los reyes de Francia tuvieron que escapar del palacio de Versalles, antes de ser guillotinados dos años después por la turba revolucionaria.

Durante febrero y marzo de este año tendremos la misma conjunción, lo que no augura que los eventos se repitan, pero sí se parezcan un poco. Desde el 17 de este mes, donde vimos en exacta unión a estos planetas, podemos haber sentido que algo completamente nuevo estaba apareciendo en nuestras vidas, en desmedro de algo que queda a la vista como fuera de tiempo, obsoleto o caduco.

Esta conjunción en febrero se dio de la mano con la unión de Quirón y el eje de los eclipses en Aries, un evento que no ocurría desde 1969. Este tránsito nos llama a sanar con mucha fuerza algo relacionado con nuestra identidad, como si fuese un renacimiento de nuestra propia energía. Un nuevo yo emerge a pesar de todo lo que duela que aparezca.

Las energías de Acuario y Aries nos permiten poder transformar la realidad en profundidad, así que durante febrero y marzo estaremos dando pasos muy importantes en relación con cambios y comienzos. El cierre con una etapa del pasado es inminente y hemos comenzado a ver concretarse estos nuevos caminos, que probablemente empezaron a verse durante el eclipse en Libra de octubre de 2023.

Marzo será un mes movido, pues tendremos esta energía haciendo eco durante la temporada de eclipses, que se iniciará con la luna nueva del día 10. Este mes veremos realmente manifestarse los cambios que estas conjunciones nos han traído a la conciencia.

El 25 de marzo tendremos el primer eclipse de Luna llena en Libra en nueve años. Tendremos una gran culminación de ciclo lunar, que inició el 14 de octubre con un eclipse de Sol. Durante este eclipse podremos ver los resultados del desequilibrio que nos llevó a abrir caminos nuevos en nuestras vidas.

Esta temporada de eclipses estará marcada por la presencia de Acuario, que apoyará con mucho tesón la transformación de las cosas. Es posible que durante marzo veamos expresiones colectivas de enojo, de novedad y de transformación en temáticas políticas que vienen mostrándose desde febrero, como lo fue el incendio de Viña del Mar.

Es posible que durante marzo hagamos evidente una realidad que no nos parecía tal, que nos demos cuenta que no es posible seguir llevando las costumbres del mismo modo, que nos liberemos y rompamos amarras con algo que nos tenía muy aprisionadas. En nuestras propias vidas personales podremos ver que hagamos saltos muy importantes a realidades que nunca habíamos pensado que podríamos vivir.

Marzo será un mes desafiante, pues además tendremos una gran acumulación de planetas en el signo Piscis. Esto nos invitará a sacarnos la venda respecto a cosas que no podíamos o queríamos ver. La claridad de esto nos gatillará el cambio, proyectando los nuevos inicios como cosas que ya no podemos seguir tapando debajo de la alfombra.

No será un mes para evitar lo que duele, al contrario, será un mes para poder enfrentarnos a lo que estamos acostumbradas a negar. Muchos patrones psíquicos, relaciones caducas o incluso acuerdos creados pueden venirse abajo, con el objetivo de integrar la novedad e integrarla a la realidad.

En las zonas Acuario, Piscis y Aries de tu carta astral es donde verás con mayor fuerza esta renovación. Las casas y planetas de tu carta astral que abarquen estos signos estarán en tensión, pero permítete que ella te renueve. La misiva de marzo de 2024 es no seguir perpetuando las mismas cosas, sin temor a los cambios que esto traiga.

Mientras más nos resistamos, más viviremos estos cambios en crisis. Si nos entregamos a que el cosmos nos está mostrando hacia dónde ir y seguimos sutilmente su camino, es posible que este mes salgamos triunfantes, renovadas y con planes nuevos. Permítete que el cosmos te transforme y te deje abrir una gran puerta en tu vida.

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