Política

José Miguel Insulza: “Vamos a tener un ciclo de fuerzas de derecha, pero está destinado a durar poco”

El exministro y senador PS, quien hoy busca su reelección por Valparaíso, reconoce que en las próximas elecciones el escenario es favorable para la actual oposición, sin embargo, advierte que "este es un país al que no le gustan los extremos, aunque hay muchos extremistas".

José Miguel Insulza PEDRO RODRIGUEZ

A pesar de que su plan era simplemente remecer posturas para tratar de buscar un acercamiento, el senador José Miguel Insulza (PS) admite que fue una idea suya la que “incendió la pradera” en la discusión del Presupuesto.

En momentos en que el debate estaba entrampado, el exministro y exsecretario general de la OEA planteó hacer una votación económica, es decir, resolver en un solo acto 29 partidas presupuestarias. “Lo hice para tratar de sacudir la modorra y ver si en algunas cosas podíamos ponernos de acuerdo. A lo mejor encendí la pradera, pero por lo menos nos ahorramos unos dos días de discusiones inútiles”, dice sonriendo, como un niño que hubiera cometido una travesura.

Pese a ello, espera que el diálogo avance, ya que, a su juicio, “es muy difícil sacar un buen presupuesto en dos semanas”.

¿Cómo está su salud?

Mi salud está muy buena. En realidad, tengo un procedimiento que mucha gente no conoce bien, un marcapasos. Después he descubierto que la mitad de mis amigos lo tiene.

¿Y eso no le afectó en la campaña?

Todo lo contrario, me permitió hacerla de mejor manera. Estaba con muestras de cansancio, que atribuía a otros males. Pero la verdad es que es todo lo contrario, con el marcapasos se acabó el problema y 10 días después salí a hacer campaña con mucho entusiasmo.

¿Y es de los que creen que se viene esta marea republicana en las elecciones?

Yo temo, al menos, que vamos a tener un ciclo de fuerzas de derecha. Pero no le veo demasiado peso. En algunos casos, se cae en la exageración. Y, por lo tanto, si es así, esto está destinado a durar poco. Este es un país al que no le gustan los extremos, aunque hay muchos extremistas.

Y en la Quinta Región, ¿alcanzan a salir tres senadores del actual oficialismo?

Es muy posible, porque hay dos listas de derecha. Pero van a ser dos o tres. Yo espero, francamente, sacar la primera o segunda mayoría. Ahora las encuestas son estrechas y también circulan encuestas que no son tan ciertas.

¿Y la lista del Frevs, donde compite su excompañero de partido Germán Correa, los perjudica?

Marginalmente nos perjudica, naturalmente. Aunque Germán esté por debajo del 1%, ese debajo del 1% tiene un significado.

¿Qué pasaría si llega un gobierno de derecha? ¿Cómo debería plantearse la oposición?

Creo que el gran peligro estaría dado por una candidatura extrema, en cuyo caso, probablemente, se produciría un período complejo, con muchas amenazas, con muchas declaraciones muy radicales, pero fíjese que en los debates, la verdad, es que no ha habido agresividad.

Fue uno de los líderes de una generación que venía de una época en que las cosas eran blanco y negro, saliendo de la dictadura. Me imagino que el contexto es menos agresivo para entenderse con republicanos o libertarios.

Tiene razón en una cosa, salimos de una dictadura en que había unos a favor y otros en contra, pero en ese momento todo el mundo quería estar de acuerdo. Los acuerdos se buscaban con bastante más facilidad. Hoy día, eso todavía está un poquito verde.

¿Podría haber una oposición constructiva a un gobierno de derecha?

Yo siempre digo que los políticos estamos para resolverle problemas a la gente y no para crear problemas. Entonces, no me gusta la conflictividad, uno está aquí para que las cosas estén mejor.

Me imagino que es clave el rol de la antigua Concertación, que tenía esa lógica de entendimientos, para llegar a acuerdos con un gobierno que, independiente del signo, va a ser de minoría.

En sectores de la oposición veo más bien un ánimo de separar, de decir que todo se va a terminar, que todo se va a cambiar, cosas que todos podemos imaginar que no son ciertas. Pero eso contagia a la gente. A mí me preocupa la población más radicalizada. Los políticos, a lo mejor, se pueden entender. Yo me puedo entender con alguien del Partido Republicano sin grandes problemas. Pero cuando los mandos vienen desde arriba exigiendo dureza, como ocurrió con el presupuesto ahora, las cosas se pueden poner más difíciles. En todo caso, el país tiene que ser gobernado.

Uno vislumbra que las derechas, inevitablemente, pueden quedar heridas, ¿puede haber más entendimiento con una de las derechas?

Sí, porque naturalmente nos hemos conocido mucho con algunos de ellos. No hay mucha derecha extrema en el Senado. Con la gente de Chile Vamos, con los Demócratas hemos trabajado durante años.

Todavía es un misterio la postura que tomará esa derecha, si es que gana, por ejemplo, José Antonio Kast o Johannes Kaiser.

Es difícil saberlo. Pueden pasar perfectamente a la oposición, pero también podrían radicalizarse a la derecha. Por lo menos la conducta de su candidata (Evelyn Matthei) me ha parecido un poquito errática, porque un día parece que quiere ser amiga del centro y otro día parece que quiere concursar por quién es más derechista.

¿Le llama la atención que políticos de la antigua Concertación hoy declaren que van a votar por Matthei?

Algunos de ellos son amigos míos, trabajé con ellos mucho tiempo y cuando los veo festejando la decisión de votar por Matthei (sonríe), naturalmente, me produce una cierta cosa, pero los comprendo.

¿Y qué hará ese mundo en un gobierno de extrema derecha, como dice usted?

Me parece que ellos en una segunda vuelta van a votar por la derecha, pero francamente no me los imagino votando por Kaiser. Cuando él habla de derechos humanos o de relaciones internacionales, al menos uno queda a miles de kilómetros de distancia.

Más sobre:PolíticaJosé Miguel Insulza

La mejor información para estas elecciones🗳️📰

Plan digital$990/mes SUSCRÍBETE