Rodrigo Mundaca: “La campaña de Jara se encuentra secuestrada por los partidos, le falta calle”
El gobernador de Valparaíso cuestiona el rumbo de la candidatura de la carta oficialista. "¿Sabe lo que le falta a la campaña de Jara? No es popular, no hay populacho, no hay pueblo", asegura. Además, acusa a las colectividades de excluir a los independientes para la conformación de las nóminas parlamentarias.
La inscripción de candidaturas parlamentarias por parte del oficialismo dejó con un sabor amargo al gobernador de Valparaíso, Rodrigo Mundaca.
El dirigente de Modatima, quien llegó a la Gobernación Regional en un cupo del Frente Amplio, habría esperado que la izquierda hiciera espacio a independientes y representantes del mundo social en sus nóminas.
Lo mismo anhela del comando de Jeannette Jara, la candidata presidencial del oficialismo, a quien critica por rodearse de apitutados y “los mismos de siempre”.
El lunes los partidos oficialistas inscribieron sus candidaturas. Como independiente, ¿cómo evalúa la negociación?
Fue un proceso capturado por los partidos de gobierno. Se caracterizó por no llevar liderazgos del mundo social ni tampoco independientes, hablando de la Región de Valparaíso. En el distrito 7 hay algo que ha llamado mucho la atención: no hay ninguna candidata mujer. Prevaleció un proceso de negociación a puerta cerrada, donde nuestra organización y quien habla no tuvimos ninguna participación.
¿Tuvo alguna instancia para advertir esto a los partidos?
Lo señalamos. Sin embargo, no fuimos escuchados. Fue un proceso de negociación poco generoso. Yo lo digo sin falsa modestia: somos el gobierno regional, después del Metropolitano, que obtuvo mayor votación a nivel nacional. Por tanto, habríamos preferido tener un trato más justo y digno.
¿Por qué cree que eso no se dio?
Prevaleció la conducta clásica de hacer política en Chile. Hemos vuelto a la lógica de los partidos, una lógica que se entendía que tenía que ser superada. Volvemos a una práctica en la cual se piensa que la ciudadanía, los independientes y los movimientos sociales tienen que ser los furgones de cola a los cuales se recurre para la votación.
¿Es un error?
Si uno lo piensa en términos muy concretos, ¿los partidos cuántos votos le van a garantizar a la candidata presidencial (Jara)? ¿Tres millones? ¿Dónde están los otros tres millones de votos para poder pasar a segunda vuelta? Nosotros hemos declarado que vamos a tener prescindencia. Como tenemos prescindencia, a propósito de que no somos incumbentes ni en el distrito 6 ni en el 7, vamos a actuar con plena libertad.
¿Prescindencia en las parlamentarias y en la presidencial también?
En materia presidencial, hoy día los errores que ha cometido la candidata son bastante poco excusables. Cuando dice que el tema del aborto libre no va a estar en sus prioridades y sí estuvo en su programa de primarias... Los temas que tienen que ver con los avances civilizatorios es importante que estén contenidos en un programa. Si se aplica la tesis de Maquiavelo, de que el fin justifica los medios, jamás vamos a tener un programa plebeyo que dé cuenta de las necesidades de la población. Nos interesa que se hable de la descentralización y de temas relevantes para Chile, un país oceánico. Esos temas están ausentes en el debate público, estamos secuestrados por temas de seguridad o de migración. Pero Chile se merece algo más desde el punto de vista de las propuestas.
¿Condiciona su apoyo a Jara a que ella trabaje en esos puntos?
Yo estoy en las antípodas de Kaiser, Kast y Matthei. No condiciono mi apoyo a Jara, pero creo que requiere rodearse de un buen elenco. El que la rodea hoy no es suficiente, siguen siendo los mismos de siempre, los mismos que han estado tratando de apitutarse eternamente. No hay ninguna posibilidad en este minuto de que haya una voz disidente porque la campaña de Jara se encuentra secuestrada por los partidos.
¿No ve espacio para independientes en el comando, más allá del alcalde de Puente Alto?
Nada, cero, no hay mundo independiente ni social. ¿Sabe lo que le falta a la campaña de Jara? No es popular, no hay populacho, no hay pueblo. Cuando se plantea una campaña que es tan difícil y donde hay modelos de desarrollo en disputa, eso no se logra comprender en la campaña. Le falta pueblo, le falta calle y escuchar las demandas de los ciudadanos y territorios.
Pese a eso, ¿para usted no son opción las otras candidaturas que se han inscrito? Como Marco Enríquez-Ominami.
No, no tengo confianza en las pymes electorales. Enríquez es una pyme electoral, eso todo el mundo lo sabe. Hoy obvio que estoy más cerca de la candidata, pero lo que no puede ocurrir es que haya complacencia con ella. Yo no puedo tener complacencia con la candidata Jara, porque la complacencia es el camino de la derrota. Esperamos de la candidatura que se corra la frontera de lo posible.
¿Ha podido hablar de esto con ella?
Hablé con ella solo en la primaria. Pero era un escenario distinto. Después de la primaria no hemos vuelto a conversar.
Cuando hace este tipo de críticas, el oficialismo suele cuestionarlo. Acusan que favorece a la derecha. ¿Cómo se lo toma?
Yo no tengo que dar pruebas de blancura de dónde milito. Milito en el movimiento socioambiental, en aquel segmento de población que está disconforme con los privilegios, con la exclusión y la complacencia. Entonces, esas críticas me dan lo mismo, no me interesan. Intentan sumarnos como una ficha más, pero no lo harán de esa manera. Nos van a sumar con nuestros pensamientos, nuestras posturas.
Dentro de las candidaturas senatoriales por Valparaíso, ¿se siente convocado por alguna?
No me voy a pronunciar por ninguna candidatura al Senado. Voy a esperar las propuestas.
¿Pero es crítico de la idea del “turismo electoral”? Insulza viene de Arica, Cariola de Santiago...
Absolutamente. El turismo electoral le hace mal a Chile. Esto de andar pastoreando los territorios, para ver dónde me puedo instalar, no lo comparto.
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