“Tengo mis reparos”: aborto legal genera conflicto valórico en al menos seis diputados y tres senadores oficialistas

“No me gusta el aborto libre, pero esperaré a conocer el proyecto en su totalidad”, dijo la senadora Alejandra Sepúlveda (independiente ex-FREVS), tras la cuenta pública del Presidente Gabriel Boric, el sábado pasado, en la que anunció que durante el segundo semestre enviará un proyecto para permitir la interrupción del embarazo.

El tema no solo molestó a la oposición y a la DC, también generó un conflicto valórico para un grupo considerable de parlamentarios oficialistas, que si bien no rechazarían necesariamente la idea de legislar, admiten sus reparos ante la idea de liberar las causales el aborto, aun cuando se trate de hasta las 12 o 14 semanas de gestación, que es lo que informalmente se maneja en las bancadas de la alianza gubernamental.

Sepúlveda es una de los tres senadores y seis diputados que son parte de la coalición oficialista que, producto de sus convicciones personales, tienen dudas sobre una medida de esa naturaleza, ya sea por razones filosóficas o religiosas.

Además de la legisladora independiente (ex-DC), sus pares Pedro Araya (PPD) y Fidel Espinoza (PS) han sincerado algún grado de objeción de consciencia en el tema. En el caso de la Cámara, en la misma postura están Raúl Leiva (PS), Cosme Mellado (radical), Sebastián Videla (independiente liberal), Jaime Mulet (FREVS), Félix Bugueño (independiente Frente Amplio) y Jaime Naranjo (PS).

A ellos se suma un grupo de legisladores oficialistas que tiene dudas respecto de la pertinencia política del anuncio. Por ejemplo, Raúl Soto (PPD, ex-DC), quien si bien ha evolucionado su postura personal a favor de esta materia, cree que es un tema que hay que conversar con la gente. El radical Tomás Lagomarsino y la independiente Camila Musante, que desde el punto de vista de las convicciones personales apoyan la medida, creen que es un error plantear el debate en estos momentos con un mero fin testimonial, en vista de que no hay piso político para legislar sobre la materia.

“Estoy reflexivo, pero no me opongo al debate”, comenta Naranjo (PS).

“Tengo mis reparos”, añade Leiva (PS).

“En la previa, tengo reparos”, coincide Mellado (radical, ex-DC).

Mulet (FREVS, exmilitante DC), incluso, planteó su objeción en la reunión de comité político de este lunes en La Moneda, a la que asistió en forma excepcional el Presidente Boric. “Fui el único representante de los 10 partidos que expresó al Presidente una postura contraria al aborto. Es una postura personal, en mi partido hay libertad en esto. Él fue muy respetuoso”, relató ayer Mulet tras la cita con el Mandatario en la que hizo un llamado a la unidad y a mejorar la comunicación entre partidos y el Ejecutivo.

Bugueño sostiene que su postura política frente a un proyecto, cuyo contenido aún no se conoce, es un tema que conversará con sus bases, dada su complejidad.

“Es un tema valórico, quiero conocer el proyecto antes de opinar”, comenta el senador Araya (PPD, ex-DC), quien ya en la discusión del aborto sobre tres causales presentó indicaciones para que exista la objeción de consciencia des profesionales y personal técnico que en un pabellón tengan que participar en una operación de interrupción del embarazo.

Tras conocer el anuncio, el senador Espinoza (PS) fue uno de los más críticos. “El discurso iba muy bien encaminado y se empaña de cierta manera al involucrar un tema que divide a los chilenos. Estuvo de más”, dijo el legislador, quien recordó que “los chilenos se pronunciaron respecto al aborto libre en lo que fue el proceso constituyente. Más de 4 millones de chilenos. Generalmente en el mundo evangélico dijeron ‘no’ en el proceso constituyente al tema del aborto”.

La senadora Sepúlveda (independiente, ex-DC y ex-FREVS), por su parte, expresó que “tal como en el aborto en 3 causales, legislar sobre un aborto legal es un tema que no será fácil para mi tomar una postura. Voté a favor de las 3 causales, pues entiendo que mi propia opinión debe ser ampliada también a la diversidad de mi electorado, y sin duda ahí hay quienes, sobre todo mujeres, que apoyan esta medida. Habrá que ver de la mano de qué otras medidas de prevención del embarazo viene acompañada la propuesta”.