Conscientes del complejo y profuso ordenamiento jurídico chileno, su decisión de especialización los ha llevado a la formación de una consolidada área de litigios en delitos económicos, donde ejercen tanto como querellantes, como en el rol de defensores. Es así como, actualmente, trabajan en casos de alto impacto como La Polar y Johnson's, entre otros.

Se trata del estudio Barahona Castillo Bonacic Abogados (BCB), creado por profesionales de la Universidad Católica, cuya experiencia profesional y académica siempre ha estado vinculada al Derecho Penal, y, por ello, han decidido trabajar de forma exclusiva en dicha área.

Una especialización que, sin embargo, no ha sido obstáculo para la generación de nuevas áreas en el estudio, puesto que a la defensa de intereses en litigios criminales, ahora sumaron el área de investigación y prevención penal corporativa.

"Las empresas han tomado consciencia de hacerse cargo de delitos de los que pueden ser víctimas. A veces tienden a esconderlos para no mostrarse vulnerables, pero hoy han comprendido que cuando ocurre un fraude, deben enfrentarlo. Es un mensaje hacia el mercado y los trabajadores", explica uno de los tres socios del estudio, Francisco Castillo, quien también es director y profesor del Departamento de Derecho Penal de la Universidad Andrés Bello.

Un área que capta cada vez más la atención luego de la Ley que establece la Responsabilidad Penal de las Personas Jurídicas, de 2009, lo que se traduce en sanciones que afectan directamente a la persona jurídica, además de responsabilidades penales de personas naturales.

Demanda creciente. Esta misma preocupación por parte de las empresas, ha generado una demanda creciente por contar con especialistas en el delito económico. "El fenómeno de la criminalidad de empresas, y en la empresa, está siempre presente en cualquier organización", explica Castillo.

Una situación que ha incrementado las actividades en este estudio. Pues, como explica José Miguel Barahona, socio y profesor de derecho procesal penal de la Universidad Católica, "parte de nuestros clientes son otros estudios jurídicos dedicados a lo corporativo, que no cuentan con un área penal económica y que requieren de una asesoría especializada, con la certeza de fidelidad respecto al cliente".

Una especialización de relevancia mayor. "En esta clase de delitos de mayor complejidad es indispensable orientar al fiscal del Ministerio Público que, muchas veces, por lo técnico de los temas, o por la enorme sobrecarga de trabajo, requiere que se le propongan líneas de investigación, o diligencias que resulten realmente eficaces", dice Cristóbal Bonacic, socio y profesor de derecho penal y procesal penal de la Universidad Católica.