Britney Spears y Justin Timberlake, el retrato de una pareja americana hecha añicos

Fueron “la pareja de América” entre 1999 y 2002. Ella como la joven hermosa y virginal, y él como el chico bueno de una de las boy bands del momento. Una historia que comenzó al coincidir en el Club Disney y que culminó entre acusaciones de infidelidad, portadas, llantos en horario prime, y canciones de despecho.


“Entiendo que me quedé corto en estos momentos y en muchos otros y me beneficié de un sistema que tolera la misoginia y el racismo. Quiero específicamente disculparme con Britney Spears y Janet Jackson, ambas individualmente porque me preocupo y respeto a estas mujeres, y sé que fallé”, escribió hace unos días Justin Timberlake a través de su cuenta de Instagram.

Un mea culpa que llega a 17 años del “accidente” de vestuario que le impidió a Janet Jackson volver a participar de por vida del Super Bowl, y a 19 del quiebre amoroso entre Timberlake y la “Princesa del pop”, cuya narrativa fue controlada por el ex Nsync*.

A una semana del estreno de The New York Times Presents: Framing Britney Spears, el artista pop decidió responder a “mensajes, etiquetas y comentarios” que lo consideran uno de los tantos involucrados en el desprestigio de la mujer de “Baby, one more time”.

“La dejaron como la prostituta del colegio”, asegura en el registro un periodista del NYT, lo que se complementa con clips de entrevistas que Timberlake dio en la época, y el posterior lanzamiento de la canción de despecho “Cry me a river”.

Un resumen que no alcanza a dimensionar cómo Justin Timberlake usó su quiebre con Britney Spears como campaña de lanzamiento de su carrera solista.

1993: Club Disney

Corría el año 1993 cuando Britney Spears (12) y Justin Timberlake (12) se unieron a The All-New Mickey Mouse Club en su sexta temporada en Disney Channel junto a Christina Aguilera y Ryan Gosling.

El programa de variedades, que combinaba canciones, bailes y la presentaciones de series originales de Disney, fue -según Timberlake- el momento que no solo los presentó, sino que también dio inicio a su amor. “Me enamoré de ella en cuanto la vi”, dijo a Barbara Walters en la controversial entrevista que cedió post quiebre en 2002.

“¿Le diste su primer beso?”, le preguntó Walters. A lo que el actor y cantante le responde: “Creo que sí, creo que yo le di su primer beso”.

1998: La princesa y el joven de bien

En noviembre de 1998, Britney hizo de telonera de un concierto de Nsync*, marcando un reencuentro que causó sensación. Más aún después de oficializar su relación ante los medios.

Tras el primer impulso de Disney, ambos tomaron la vía musical por su cuenta. Para 1999, Britney había participado en diversos programas de talento infantil y adolescente, y cuando tenía 17 años, lanzó su exitoso álbum debut ...Baby One more time.

Timberlake, en tanto, tenía el primer álbum junto a Nsync*, la producción que los lanzó a la fama en tiempos de Backstreet Boys y Westlife.

Mientras Britney era retratada como la joven hermosa y dulce que bailaba entre la sensualidad y el recato, Justin fue considerado el chico bueno de rizos rubios que expresaba amor por su madre cada vez que podía.

1999-2002: Los novios de América

Britney y Justin acaparaban las miradas, portadas, y notas televisivas de televisión. Ambos asistían a conciertos, premiaciones, estrenos de películas y eventos deportivos, y aparecían como invitados sorpresa en sus respectivos conciertos.

Juntos y por separados, les preguntaban por su relación sentimental -con especial énfasis en la vida sexual de Britney hasta llevarla a decir que quería “esperar al matrimonio”-.

Un cuento de hadas de la música pop, que llegó a su fin en abril de 2002, cuando se hizo público el quiebre.

2002: Cry me a river

En julio de 2001, Nsync lanzó su álbum Celebrity, el último disco de estudio antes de que Justin Timberlake decidiera emprender una carrera solista.

Justified fue el disco que marcaría sus inicios en solitario. Sin embargo, con “Like I love you” como single promocional y la pegajosa “Rock your body”, no logró llegar al Top 10 del ránking Billboard.

En paralelo a este giro en su vida profesional, los medios festinaban con su ruptura amorosa. Aunque en un comienzo ambos se alejaron de la prensa, poco a poco los rumores de una infidelidad por parte de Britney como causante del término, se fue transformando en la razón oficial.

La “femme fatale” rompiendo el corazón del “chico bueno”, fue una creencia que prendió como pólvora, y Timberlake no hizo esfuerzo por acallarla.

En septiembre de ese año, Justin Timberlake invitó a la periodista Barbara Walters del programa 20/20 de ABC News a su casa familiar en Memphis, “un lugar que me pone especialmente nostálgico”, dijo Timberlake.

La entrevista llevaba apenas tres minutos cuando Britney fue mencionada. “Nuestros caminos se iban a separar, así que me senté con ella y le dije ‘si alguna vez me necesitas, quiero que sepas que siempre voy a estar aquí porque te quiero y siempre te querré’, pero también dije ‘digamos lo que digamos, la gente va a especular y me parecería horrible decir algo y que alguien lo malinterpretase, porque eso pasa todo el tiempo’ y le prometí que jamás diría específicamente por qué terminó nuestra relación”, dijo el cantante.

A continuación, Walters le preguntó si es cierto que terminaron debido a una infidelidad. “Honestamente, no somos perfectos, yo no juzgo a nadie”, dijo sin confirmar ni negar los rumores.

Luego, Justin tocó una canción en el piano. Si bien Walters le pidió que tocara una de Justified -para promocionar su álbum-, Timberlake optó por interpretar un tema titulado “Terrible woman”. Luego afirmó que “ninguna canción de Justified está inspirada en Britney”.

A continuación, lo inevitable para esos años: Walters le preguntó a Timberlake por su vida sexual, o más bien, por la vida sexual de Britney. “¿Mantuvieron la promesa?”, preguntó Walters aludiendo a la declaración de Britney de “esperar al matrimonio”. Con una risa irónica, Justin dijo “Claro, claro que sí”.

Al tiempo, Britney se refirió -por vez única- al comentario de Timberlake en conversación con la revista W: “Solo me he acostado con una persona en toda mi vida. Fue después de dos años de relación con Justin y pensé que él era el hombre de mi vida. Por lo visto me equivoqué. No creí que iría al programa de Barbara Walters y me vendería de esa forma”.

Para cerrar, Walter le preguntó a Timberlake: “¿Qué tipo de mujer te gustaría presentar a tu madre?”, a lo que el cantante dijo: “A alguien como ella”.

La entrevista para 20/20 fue solo el comienzo de una serie de declaraciones en radio, televisión y medios escritos. Si bien el lanzamiento de Justified era el tema central, no se negaba a responder preguntas sobre su expareja.

Dos meses después de la conversación con Walters, Timberlake lanzó la canción “Cry me a river”, un desgarrador tema sobre un quiebre tras una infidelidad.

Quien canta siente un profundo dolor a causa de la traición de su amada, lo que complementa con un video en medio de la lluvia y una protagonista rubia y delgada que usa pantalones a la cadera y boina. Muy similar al estilo de Britney Spears, aunque Timberlake dijo en entrevista con MTV que “la canción no es sobre Britney, es sobre mí”.

Distanciados y continuando cada uno sus respectivas carreras, a lo largo de los años Timberlake hizo varios comentarios que develaban que “Cry me a river” no era el punto final de su desahogo.

2003: Madonna y Britney en los VMA’s

En los premios VMA’s del año siguiente, Justin Timberlake ganó cuatro galardones por “Cry me a river”: Video Pop, Video Masculino, Video Dance y Video del Año. Las cámara los seguían a cada momento.

Sin embargo, uno de los enfoques no lo mostró celebrando. Cuando Madonna, Christina Aguilera, Missy Elliot y Britney Spears subieron al escenario para cantar “Like a virgin”, culminaron con un polémico beso que acaparó los comentarios de la jornada -y los días siguientes-.

“No estaba enfadado, sino que no estaba impresionado, si vas a hacerlo, hazlo de verdad (...) Me hubiese gustado ver algo de lengua”, dijo en conversación con The Sharon Osbourne Show.

2007: El peor año de Britney vs. el mejor de Justin

Tras años de asedio de la prensa, cuestionamientos por su vida sexual, relaciones amorosa, desempeño como madre, apariencia física, noches de fiesta con Paris Hilton y Lindsay Lohan, y reacciones cada vez más violentas con los paparazzi; Britney no dio más.

En tiempos que peleaba por la tuición de sus hijos tras el divorcio, decidió raparse el cabello, y al tiempo intentó detener el acoso de los medios defendiendo su privacidad a punta de un paraguas.

Al año siguiente, la justicia estadounidense determinó que ella no estaba en condiciones de hacerse cargo de su carrera, sus finanzas, bienes y su vida en general. Desde entonces, está en una batalla legal por liberarse de la tutela de su padre, Jamie Spears.

Justin Timberlake, en tanto, lanzó FutureSex/LoveSounds, con la popular “Sexy back” y la -también canción de despecho- “What goes around, comes around”. Con esta producción obtuvo varias nominaciones a los Grammy, y fue elegido Mejor artista masculino en los Brit Awards.

Un logro que celebró con un extraño discurso. “Muchísimas gracias por esto. Estoy muy agradecido. Actualmente estoy en mitad del tour así que no he podido estar ahí. ¡Que tengan todos una noche fantástica! Y dejen de beber. Saben a quienes me refiero. Estoy hablando contigo. ¡La revista OK! va a publicar algo malo sobre ti!”, dijo al micrófono.

2008: Justin presenta a Madonna y critica a sus “imitadoras”

En la ceremonia de inducción del Rock ‘n Roll Hall of Fame, Timberlake fue el encargado de presentar a Madonna. Un acto que decidió complementar con una crítica a quienes siguen su ejemplo. “El mundo siempre ha estado lleno de imitadoras de Madonna, es posible que yo haya salido con un par”.

2009: Una “broma” en Saturday Night Live

Justin fue invitado al popular programa de sketches, instancia en la que dijo: “Al principio de los tiempos, él salió con una famosa cantante. Públicamente, dijeron ser vírgenes. Pero en privado… se la tiró”.

2018: Justin desprecia las residencias en Las Vegas

Entre 2016 y 2017, Britney Spears anunció Britney: Piece of me, un espectáculo que consistiría en una residencia fija en Las Vegas. En 2018, Timberlake en conversación con Zane Lowe para Apple Music, dijo: “Es un poco… cómo decirlo. Conmigo no funcionaría, ¿sabes? Siento que parece que te estás preparando para retirarte”.

2018: Timberlake publica su libro Hindsight: & All the Things I Can’t See in Front of Me

Justin publicó un libro que, más que una autobiografía, es una suerte de álbum de fotos y párrafos que hablan de su vida y carrera artística. Uno de los aspectos llamativos -que ayudaron a su promoción- fue un extracto en el que se refiere a la composición de “Cry me a river”.

“Me despreciaron. Y yo me cabreé (...) Escribí ‘Cry Me a River’ en dos horas. Ni siquiera lo planeé. Los sentimientos que tenía en aquellos momentos eran tan fuertes que necesitaba escribirlos y poner mis sentimientos en algo que la gente pudiera escuchar y, con un poco de suerte, sentirse reflejados. La gente me escuchó y me entendió, porque todos hemos estado ahí”, dijo en Hindsight.

2021: Framing Britney Spears y las esperadas disculpas

Tras la publicación del documental de The New York Times, el movimiento #FreeBritney no solo ha adquirido mayor difusión las últimas semanas, también resurgió el nombre de Justin Timberlake como uno de los tantos involucrados en la mala fama de la artista pop.

Un aspecto al que los espectadores no quedaron indiferentes, expresándose por medio de comentarios, etiquetas y mensajes que Timberlake -de alguna u otra forma- recibió.

“La industria es defectuosa. Prepara a los hombres, especialmente a los hombres blancos, para que tengan éxito. Está diseñada de esa forma. Como un hombre en una posición privilegiada, tengo que hablar al respecto. Debido a mi ignorancia, no tomé conciencia de todo lo que estaba ocurriendo mientras sucedía en mi propia vida, y no me quiero beneficiar nuevamente de la caída de otros”, escribió en su declaración en Instagram.

“Me preocupo profundamente por el bienestar de las personas que amo y he amado. Puedo ser mejor y seré mejor”, concluyó.

Según informa Bloomberg, Netflix trabaja en un nuevo documental sobre Britney Spears, el que comenzó su pre-producción previo al estreno de The New York Times Presents: Framing Britney Spears.

Un registro documental de 1 hora que resume la vida artística y personal de la cantante, explicando el origen del movimiento #FreeBritney que busca liberar a Spears de la tutela de su padre sobre su patrimonio.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.