Choque entre Vodanovic y Escalona tensiona al máximo al PS por definición de pacto electoral

Las tratativas al interior del socialismo llegaron a su punto de mayor crispación. En medio de las dos posturas al interior de la tienda -para mantenerse en el Socialismo Democrático o irse con Apruebo Dignidad en caso de competir en dos listas-, la timonel de la colectividad golpeó la mesa: durante una reunión de la directiva pidió marginar al secretario general de las negociaciones políticas para buscar candidatos.


El Partido Socialista (PS) está viviendo días intensos. De aquí hasta el 6 de febrero la colectividad tiene que tomar una difícil decisión: ir en lista única con Apruebo Dignidad o mantenerse en el pacto electoral con su aliado histórico -el PPD- y quedarse con el Socialismo Democrático.

Los ánimos para tomar esa definición no son los mejores. Una señal de eso fue lo que se vivió en la reunión de la mesa directiva de este martes. Fuentes del partido comentan que el encuentro, que estaba citado de 8.00 a 11.00 de la mañana, estuvo marcado por un fuerte enfrentamiento entre la timonel del PS, Paulina Vodanovic, y el secretario general, Camilo Escalona.

Ambos dirigentes socialistas están en veredas distintas. Mientras Vodanovic ha transmitido que el PS tiene que quedarse con el Socialismo Democrático, Escalona ha defendido la tesis contraria, es decir, llegado el momento -dicen fuentes del partido- el exsenador ha dicho que se debe privilegiar el gobierno y, por lo tanto, pactar con Apruebo Dignidad.

En ese contexto, fuentes de la mesa del PS dicen que Vodanovic golpeó la mesa. La abogada manifestó su molestia debido al desempeño de Escalona en el trabajo político y técnico de búsqueda de candidatos y el proceso para armar las fichas con los papeles de los aspirantes a consejeros constitucionales de las elección del 7 de mayo. La preocupación de Vodanovic surgió luego de que solicitara los antecedentes y Escalona respondiera que no tenía avances que mostrar.

El reproche fue tan grande, dicen las mismas fuentes, que Vodanovic invocó los estatutos del partido para intervenir las labores de Escalona. Algunas versiones afirman que en ese momento la timonel socialista argumentó que tenía las facultades para sacar a Escalona de las negociaciones de selección de candidatos. En esa línea, de acuerdo a las mismas versiones, Vodanovic argumentó que la obligación legal de inscribir la lista es de quien preside al partido y que si ese trabajo no está registrando avances, el tiempo se acaba y en este asunto no se puede improvisar a último minuto ya que el riesgo de cometer errores es muy alto.

Dado que Vodanovic requirió esa información y se dio cuenta que los antecedentes no estaban, propuso que el vicepresidente Eduardo Bermúdez se sumara a Escalona para tomar el liderazgo de ese trabajo. Fue en ese momento en que otras voces de la mesa manifestaron lo contraproducente que podía ser esa decisión. Otras dos fuentes de la directiva, en tanto, cuentan que Vodanovic lo que pidió fue que Bermúdez reemplazara por completo a Escalona en estas funciones.

Incluso Escalona pidió la palabra. Con un tono calmado, el secretario general se excusó diciendo que ante tanta incertidumbre en materia electoral, era imposible tener avances cuando aún no hay definiciones sobre, por ejemplo, con quiénes se integrará el pacto electoral. Además, dicen fuentes de la mesa, Escalona argumentó que una decisión así se tenía que tomar en la comisión política.

La tensión quedó instalada en la mesa. Para los dirigentes que son cercanos a Escalona el asunto fue percibido como un intento por sacarlo del camino y aislar así su postura de pactar con Apruebo Dignidad. Para otros sectores el asunto estuvo lejos de ser una revancha política, sino que solamente se trató de una decisión de “gestión política” ante un trabajo que no está avanzando y que no se puede improvisar.

El episodio, en todo caso, cristalizó lo que ha sido la dinámica de la relación entre Vodanovic y Escalona, la que, según fuentes del partido, no ha estado exenta de tensiones e, incluso, estaría quebrada. De hecho, en la colectividad comentan que a la líder del PS le molestó que ayer el secretario general abordara el tema con la prensa.

La crispada reunión, además, se dio en la antesala del encuentro de la comisión política que está, en principio, citada para la tarde de este miércoles, instancia en la que se definirá con quién pactará el PS en caso de ir en dos listas para los comicios. De hecho, un integrante de la mesa pidió que se evalúe la pertinencia de mantener esa citación y propuso moverla para el jueves o viernes. Ante dicha solicitud, Vodanovic quedó de analizar el asunto.

Consultado por el encontrón que tuvo con Vodanovic, Escalona descartó que haya sido marginado de la negociación de los candidatos a consejeros constitucionales. “Mis funciones son inalterables. Yo como secretario general del partido continuaré defendiendo la política que el partido aprobó el sábado: lista única de todas las fuerzas democráticas del conglomerado de gobierno y ojalá también de la DC”, afirmó el secretario general.

Luego reiteró el punto: “Mis funciones son las mismas que tenía ayer. Mi trabajo continúa siendo exactamente el mismo”.

Tras la publicación de La Tercera PM, en la que se dio cuenta del altercado entre ambos dirigentes, la directiva del PS envió un comunicado señalando que “aclaran” que mañana el partido sostendrá una nueva reunión de mesa y que las negociaciones de las candidaturas continuarán a cargo de Escalona.

La arremetida de Escalona

Entre los socialistas comentan que toda esta tensión ha estado marcada por el rol que ha asumido Escalona en el último tiempo. El histórico dirigente socialista -quien ha presidido el partido en tres ocasiones y que además ha sido senador y diputado- se ha movido internamente defendiendo una sola postura: la lista única en unidad con la alianza de gobierno. “El Socialismo Democrático tiene su pilar principal en nuestro propio partido, no existe si nosotros no participamos”, afirmó el dirigente el lunes.

En esta cruzada, reconoce una fuente de la comisión política del PS, queda en evidencia “la perseverancia de mantenerse como un liderazgo preponderante en el partido”. La insistencia de Escalona por la lista única, admiten al interior del PS, ha tensionado y friccionado el partido. Por un lado, comentan fuentes cercanas a él, su actuar se explica no por un cálculo electoral sino que por una “convicción política”. Escalona, dicen los socialistas, en este tiempo se ha caracterizado por ser un “gobiernista” y que su mayor bandera política ha sido la unidad.

Esto ya se pudo apreciar, por ejemplo, en la negociación constituyente del Acuerdo por Chile. Las pocas veces que Escalona participó de las tratativas, su postura siempre estuvo del lado de Apruebo Dignidad. De hecho, en más de alguna ocasión, jugó como socio con el timonel de Convergencia Social, Diego Ibáñez. “Escalona siempre ha sido gobiernista. Pese a sus reparos con el Frente Amplio, tiene conciencia de que hay que dar señales en favor del gobierno y la unidad”, comenta un parlamentario del partido.

Otro integrante de la comisión política del PS agrega que la activación de Escalona en este tema genera ruido en el partido. Esto, porque es considerado por algunos como un intento por preparar su camino para volver a presidir la tienda y opacar el liderazgo que ha adquirido Vodanovic en los últimos meses.

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