Tim Samaras, uno de los cazadores de tormentas más conocidos del mundo, falleció este viernes, junto a su hijo Paul, y el fotógrafo Carl Young, otro de sus compañeros, en Reno, Oklahoma, mientras seguían un nuevo tornado, informó su hermano a través de Facebook.

"Todos fallecieron lamentablemente, pero haciendo lo que amaban", escribió Jim Samaras, hermano de la víctima.

Tim Samaras, de 55 años, pasó los últimos 20 años siguiendo las predicciones de tornados y colocando sondas diseñadas por él, para medir los datos desde el interior. "Los datos de las sondas nos ayudan a entender la dinámica de los tornados y cómo se forman", dijo en su última entrevista a National Geographic. "Con esa pieza del rompecabezas podemos hacer predicciones más precisas y, finalmente, dar a la gente las advertencias con anticipación".

Entre sus actividades, Tim Samaras había fundado un programa de investigación sobre la formación de tornados llamado Tactical Weather Instrumented Samping in Tornadoes Experiment (TWISteX) para poder alertar de estos fenómenos con antelación.