Argentina
SEÑOR DIRECTOR:
Al flamante primer mandatario transandino le convendría contener un poco su ímpetu de candidato y sin perder la fuerza de la arenga de campaña, el tantas veces triplemente reiterado “¡Viva la libertad, carajo!”, reemplazarlo por uno de similar vigor aunque con más sentido, sobre todo cuando se le ha entregado la responsabilidad de gobernar a la nación en su conjunto y, de paso, sin exponer la dignidad del cargo. Sería más adecuado un ¡Viva la libertad! ¡Coraje!.
Rafael Rosende
Lo último
Lo más leído
1.
3.
4.
5.