Opinión

Siete ingredientes para el análisis del nuevo ciclo post Boric

Mario Téllez / La Tercera MARIO TELLEZ

A horas del cierre de mesas de esta histórica elección, la información significativa es abundante y requiere de tiempo para armar y madurar un cuadro analítico que comprenda los efectos de esta elección en la era post Gabriel Boric y procesos constitucionales fallidos.

De manera preliminar se proponen algunos ingredientes que hay que considerar en cualquier análisis.

1. Sale Chile Vamos: el cambio de hegemonía en la derecha es un hecho, al igual que la jubilación de la otrora patrulla juvenil. De todos modos, la derecha tradicional conserva los muebles por la necesidad de formar mayorías parlamentarias y equipos de Gobierno ¡Pero cuidado!, existe el riesgo de transformarse en el Socialismo Democrático del Frente Amplio; una especie de simple fusible para solventar los próximos errores gubernamentales.

2. ¿Y la derecha económica qué?: Evelyn Matthei ganó en Santiago Oriente, y en ninguna otra parte. El sentido común de los chilenos comunes se desacopló del de los empresarios, y estos tendrán que vérselas con una derecha política más doctrinaria, popular y evangélica. Un nuevo lugar donde la elite no tiene canales de comunicación y deberá buscar, a la brevedad, contactos por whatsapp para incidir en el proceso.

3. La noche de los cuchillos largos oficialista: pese a que es probable que no haya crónica roja oficialista por estos días, para evitar que Jeannette Jara se desfonde completamente en segunda vuelta, es evidente que el sector tiene que sacar cuentas y cobrar errores. Si bien la unidad evitó una debacle completa en el Congreso, después de la segunda vuelta es momento para que emerjan las diferencias y las disputas por los liderazgos.

4. La supervivencia judicial del oficialismo: Si es que José Antonio Kast finalmente gana tiene todo para dar vuelta los papeles de todos los ministerios para poner en el banquillo a los actuales altos funcionarios oficialistas. Para ello cuenta además con una Contraloría con ánimo fiscalizador y un Congreso que puede convertirse en un circo romano de comisiones investigadores y acusaciones constitucionales ¿Escenario Bolsonaro - Lula?

5. Jara frente al espejo: Si bien la derrota personal es dura, en su mano está el estandarte para liderar la retaguardia electoral y evitar salir completamente trasquilada. Tal vez sea el momento en que la autenticidad que la llevó a la primera línea, la salve de contarse entre las bajas fatales de esta batalla. Pareciera que es mejor dar batalla con banderas propias, que las prestadas banderas de un conglomerado que se hunde por su falta de coherencia interna y sintonía social.

6. Las claves para entender a Parisi: Franco Parisi pasó desapercibido, pero representó a casi un quinto de los chilenos. Su triunfo en el norte, su estrategia de pirquineo de votos online, y la simplificación del dilema político pueden ser elementos de la política futura. ¿El Nayib Bukele chileno?

7. ¿Dónde está el malestar?: las candidaturas de Franco Parisi y Johannes Kaiser -y sus adláteres parlamentarios- pueden celebrar en gran medida porque lograron representar un clima de molestia con las elites. Si bien no logran hegemonías en el Congreso, su tono y estilo podría marcar las nuevas elecciones e ir creciendo. Los excluidos ven en ellos autenticidad y representación, campo que pertenecía a una vieja izquierda que ahora se percibe como elitizada e intelectualizada que no permea esas capas.

Por Cristóbal Osorio, profesor de Derecho Constitucional, U. de Chile.

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