¿Por qué el gobierno argentino se involucró en el mercado de las láminas del álbum del mundial de Qatar?

La fiebre mundialera de las personas en Argentina por completar el libro de autoadhesivos de la Copa del Mundo fue superior a la oferta del mercado. Además, la falta de sobres de stickers dio paso para denuncias contra la empresa responsable, sobreprecio y mercado negro.


El interés de las personas en Argentina por el mundial de fútbol de Qatar se sobrepone al mal momento económico en el país vecino, y los trasandinos salieron en masas a comprar las láminas del álbum de la próxima cita mundialera. Sin embargo, el mercado no pudo soportar la demanda y dio paso a una crisis que motivó al gobierno argentino a salir al paso.

“Abrimos un canal de diálogo poniendo a disposición nuestros equipos legales y técnicos para colaborar en la búsqueda de posibles soluciones”, manifestó la Secretaría de Comercio de Argentina en Twitter, aunque no se refirió a medidas concretas.

El primer conflicto nació entre los kiosqueros y el fabricante de los conocidos álbumes Panini. Los distribuidores tradicionales de las láminas en Argentina acusan a la firma de la falta de stock y afirman que rompió con una tradición al permitir que las cadenas de supermercados, gasolineras y aplicaciones móviles vendieran los productos Panini. La editorial italiana también cuenta en su catálogo con albúmenes de series, videojuegos y películas, entre otros.

Ante este escenario, la empresa New Rita S.A, que tiene la licencia para comercializar los productos Panini en Argentina, y de la Unión de Kiosqueros de la República Argentina (Ukra), se encuentra en una mesa para solucionar un problema que no es menor, ya que las personas en Argentina están motivadas en la previa del mundial.

Los hinchas de la selección Argentina confían que esta Copa del Mundo la podrán ganar y muestran su optimismo en las ganas de completar el álbum del mundial, y son ellos mismos los que denuncian los problemas que tiene este mercado, ya sea por medio del humor o la indignación, según muestran las tendencias de redes sociales.

Otro de los problemas que se destacan es que se estarían fijando los precios por encima de los 150 pesos argentinos (poco más de un dólar) que vale cada sobre con cinco láminas, que vienen de forma aleatoria, o cromos, conocidas en Argentina y Uruguay con el nombre de “figuritas”.

La venta de álbumes y cromos del Mundial comenzó el 24 de agosto y en pocos días ya estaban agotados. En un principio se atribuyó a una estrategia de mercadeo de la empresa licenciataria para generar más expectativa, pero ésta lo negó en un comunicado y se comprometió a normalizar la situación a la brevedad, destacó la agencia AP.

En esa línea, la escasez de estampas también dio pie a estafas en línea y las autoridades argentinas llamaron a comprar en lugares establecidos.

Mientras que, en Chile también se comercializa el álbum del mundial de Panini, pero sin problemas de abastecimiento y sin grandes señales de que las personas están motivadas por comprar las láminas de un evento al cual no participará. Además, el retail, supermercados en Chile, librerías y aplicaciones de delivery comercializan el producto sin mayores quejas de los kiosqueros, panorama contrario al de Argentina.

En suelo nacional, el sobre de láminas se comercializa cercano a los $750 y se necesitan cerca de 670 stickers con 50 especiales y 80 extra para completar el álbum del mundial de Qatar, según resalta Panini en su página oficial. Aproximadamente, se necesitaría gastar cerca de $120.000 para tener todos los autoadhesivos necesarios.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.