Anya Taylor-Joy: en la mente de la protagonista de Gambito de Dama

La actriz y modelo británica-argentina de 24 años, interpreta a Beth Harmon, personaje llevado a la pantalla por Netflix a partir de la novela de Walter Tevis. Con menciones a las empanadas, las adicciones y el feminismo, la artista se dirigió a su público para hablar sobre el personaje que encarna y ella misma.


Beth Harmon es un personaje, a lo menos, peculiar.

Huérfana a temprana edad, fue enviada a un orfanato donde mantenían bajo control a las niñas con constante suministro de medicamentos. Sintiéndose desadaptada y solitaria, Beth encontró compañía en el conserje de la escuela, de quien aprendió a jugar ajedrez.

Con un talento increíble para el juego de mesa, la joven divide su vida entre las fuertes carencias afectivas, las adicciones para intentar llenar tal vacío, y el inicio de una carrera como ajedrecista de talla mundial.

La última característica de Beth Harmon es que no existe. Es un personaje de ficción creado por Walter Tavis en la década de los 80 en su novela Gambito de Dama. Una historia que fue llevada al streaming de la mano de Netflix y Anya Taylor-Joy como la protagonista.

De origen británico-argentino, la actriz de 24 años cambió su larga melena rubia por un corte de los 60′ en tono pelirrojo. Si bien el diálogo es parte importante de la historia, son sus grandes ojos los que dicen más a lo largo de la serie: la soledad, la confusión, la frustración, tristezas y alegrías.

“Había algo en el personaje de Beth que yo podía ver en mí misma, eso de sentirse aislada y tener este mundo fuera de lo común donde tienes un talento. Me podía ver mucho en ese personaje”, relata Anya Taylor-Joy en una entrevista por zoom publicada por Netflix.

Anya Taylor-Joy. Photo: Magnus Sundholm for the HFPA.

Una experiencia que describe como un aprendizaje que aún sigue su curso. “Con Beth aprendí -o estoy aprendiendo todavía- a cuidarme mejor. A alimentarme bien, a asegurarme que duermo. Porque creo que los últimos seis años que trabajo como actriz, siempre eran los personajes primero y después yo. Con Beth, para interpretarla bien, me tenía que cuidar”.

Cuando Taylor-Joy fue contactada para interpretar a Beth Harmon, aún no existía un guión. Fue tras conversar con el director de la serie y leer la novela original, que quedó cautivada por la historia.

“Agradezco mucho haber trabajado con Scott Frank, sabía que era un director increíble. Y cuando primero conectamos, no había guión, pero sí estaba el libro, y bueno, a mí me encanta leer y ese libro me lo morfé como en una hora y media (sic)”, confiesa a sus fans.

Entre fármacos y alcohol, Beth se enfrenta constantemente a su traumas personales en contraposición a sus frustraciones como mujer ajedrecista. Las sustancias son un escape temporal a las penas, y parte de su aprendizaje, es descubrir que no puede huir eternamente de sus problemas.

“Las adicciones de Beth son una temática muy compleja para ella, y creo que para muchos”, dice la actriz. “Se manifiestan por razones muy diferentes. Y era importante para nosotros que mostráramos eso”, reflexiona sobre el abuso de alcohol y pastillas.

“En la serie la vez tomando porque se siente aislada. Tomando las pastillas porque de repente siente demasiado y necesita una sensación de control. A veces se está castigando. Creo que es importante que veas todas las razones diferentes por las que una persona abusa de sustancias”, analiza Taylor-Joy.

Nacida en Estados Unidos, fue criada en Argentina hasta los 6 años, donde solo hablaba español. Luego se trasladó a Inglaterra, donde fue educada en inglés, estudió ballet, y a los 16 le ofrecieron un carrera como modelo. Fue en medio de las pasarelas y publicidades que captó la atención de un representante de actores y actrices.

“Vengo de muchos lugares diferentes, pero creo que mi caridad y mi actitud ante la vida, es de Argentina, y agradezco mucho esa parte de mi historia”, dijo Taylor-Joy en un perfecto español con acento trasandino.

“Mis comidas favoritas son de Argentina, las empanadas, el pan de provolone -que me gusta más que la pizza- y los churros con ceviche”, añade como dato extra.

Al igual que muchas personas, la actriz ve Gambito de Dama como una historia sobre empoderamiento femenino, y una nueva forma de dar a conocer otras realidades y conflictos que no suelen verse en pantalla.

“Creo que las mujeres hoy tenemos una voz más fuerte y que la sociedad entiende que efectivamente hay un problema de desigualdad. Antes no se tocaba tanto el tema. Pero poco a poco se ha tomado el tiempo de construir una sociedad que ha sido sexista por gran parte de su historia, y tenemos que continuar la lucha. Va tomar tiempo, pero vamos a llegar”, concluye la actriz.

Gambito de Dama está disponible en Netflix.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.