Cuatro días después de la final de la Champions League, el estadio Allianz Arena de Múnich volvió a recibir un partido de alto vuelo. Esta vez, en selecciones. Aprovechando la ventana de la fecha FIFA, comenzó el final four de la UEFA Nations League, en su cuarta edición. Esta competencia, que surgió desde la Confederación Europea para que sus combinados nacionales jueguen entre ellos en los recesos internacionales, busca un nuevo campeón. En la primera semifinal, Portugal le dio vuelta el partido a Alemania. Se impuso 2-1 y va por la corona.

El partido contó con turbulencias en su desarrollo. Se retrasó en su inicio en 10 minutos por condiciones climáticas adversas. La lluvia y el granizo alteraron la planificación, sin embargo logró jugarse sin problemas. La cancha del Bayern Múnich se veía impecable.

Portugal, con Cristiano Ronaldo como su incombustible buque insignia y con dos ganadores de la Champions en la titularidad (Joao Neves y Nuno Mendes), salió con una propuesta interesante. No se preocupó más de su portería, como sucedía en la época de Fernando Santos. Con el español Roberto Martínez, ex DT de Bélgica, los lusos tienen una clara intención ofensiva, copando espacios en campo rival y presión alta.

CR7 contó con la primera oportunidad en los 6′. Tras una media vuelta, saca un remate que acaba en las manos de Ter Stegen. Sin Manuel Neuer, se le abre la ventana de la titularidad al golero del Barcelona. Alemania, que no contó con Jamal Musiala (baja fundamental), fue despertando y empezó a llegar al área portuguesa. La más clara sucedió en los 21′, con un remate de Goretzka que obligó a un tapadón de Diogo Costa.

Los germanos, anfitriones de la fase final de la Nations League, decepcionaron. Pese a que lograron estar en ventaja, no mostraron una fuerza colectiva convincente. El único que supo destacar fue Joshua Kimmich, cuyos descuelgues por la derecha le aportaban claridad al ataque alemán. El jugador fue homenajeado por alcanzar 100 partidos con el seleccionado.

Uno de escasa influencia durante los primeros 45 minutos fue Florian Wirtz. El habilidoso futbolista del Bayer Leverkusen, cuyo futuro asoma en el Liverpool (lo que sería una transferencia millonaria), no tenía una presencia importante en el partido. Pero apenas comenzado el complemento, apareció para romper el cero.

La polémica del duelo fue con el 1-0 de Alemania. Minuto 48 y Wirtz anota mediante un cabezazo, tras una notable asistencia de Kimmich. El punto de conflicto fue que el centrodelantero Woltemade interfirió al zaguero Rúben Dias, evitando que intervenga. El VAR llama al árbitro esloveno Slavko Vincic para que revise la acción y el juez central mantuvo su decisión. Gol.

La desventaja hizo más fuerte a Portugal. Los lusos se reactivaron y el técnico Martínez metió tres cambios al mismo tiempo. Acertó con todos. Nelson Semedo, Vitinha y Francisco Conceicao fueron relevantes para remontar el encuentro. En los 63′, un pedazo de gol de Conceicao, clavando el balón en un ángulo (a lo Lamine Yamal, arrancando desde la derecha al centro) puso el 1-1.

Faltaba la aparición de Cristiano. En los 68′, el goleador histórico de las selecciones nacionales marcó el 2-1, conectando el balón tras un desborde y centro bajo de Nuno Mendes. No era un tanto más. Además de añadir a la sumatoria personal en busca de los 1.000 goles, significó el que le dio el triunfo a su escuadra. Después de seis encuentros ante Alemania, fue la primera vez que el Bicho derrotó a los teutones (tenía cinco derrotas en la cuenta).

Portugal se instala en la final del domingo. La segunda llave de semifinales se juega este jueves, con un choque de trenes entre España y Francia (15.00 horas de Chile). Lamine Yamal versus Ousmane Dembélé. ¿Se pone en juego el próximo Balón de Oro?