¿Juntos o separados? El dilema oficialista en la campaña por el Apruebo

Este sábado, las dos coaliciones de gobierno tendrán una cita para sondear una posible coordinación de cara al plebiscito de septiembre. Con un Socialismo Democrático que no ha dado muestras de querer iniciar una campaña con fuerza, en el gobierno temen que en ese sector empiece a primar una tesis “desmovilizadora”.


El lunes, casi al final del comité político ampliado con los partidos, fue el escenario que escogió la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, para plantear una inquietud que ronda hace días en La Moneda.

“Nos preocupa saber qué es lo que demora tanto las definiciones, ¿qué tiene que pasar para que se sumen?”, consultó la secretaria de Estado, según varios de los presentes. La ministra hizo alusión al “retraso” del Socialismo Democrático en comparación a Apruebo Dignidad respecto de la campaña por el Apruebo de cara al plebiscito del 4 de septiembre.

“¿Te refieres a una falta de voluntad de los partidos?”, le retrucó, según las mismas fuentes, el presidente del Partido Socialista (PS), Andrés Santander, quien le recordó que la coalición ya oficializó una postura por el Apruebo. Pero Santander no se quedó ahí. Le recalcó, de acuerdo a las mismas versiones, que no iniciarán ninguna campaña antes de que se disuelva el pleno de la Convención Constitucional, el 4 de julio.

Las palabras del timonel socialista encontraron inmediato respaldo de su par del PPD, Natalia Piergentili, quien añadió que tampoco pueden “plegarse” sin una conversación política anterior de fondo, mientras que en Apruebo Dignidad se apuraron en decir que la convocatoria está hecha “desde hace tiempo”.

En la coalición algunos leyeron el episodio como un llamado de atención de la ministra en un escenario en que el Ejecutivo está preocupado. Esto, porque en su poder, ya maneja datos -provistos por la Secom- en los cuales se reafirma que no se puede dar por sentado que gane el Apruebo en el plebiscito, debido a que hay un electorado que está altamente indeciso y que, en un inicio, era favorable a una nueva Constitución.

Lo cierto es que a un mes de poder iniciar legalmente el despliegue electoral, el dilema de una campaña conjunta en el oficialismo -o por carriles separados- no se ha resuelto y es algo que Palacio mira con especial atención, especialmente lo que ocurre en el Socialismo Democrático. En esa coalición ha empezado a ganar terreno una tesis “desmovilizadora” en los sectores de la ex Concertación que tienen reparos con el contenido del borrador de la nueva Carta Magna.

En medio de las críticas al sistema político que elimina instituciones como el Senado y al eventual “cerrojo” de 2/3 para reformar el nuevo texto constitucional, la campaña del Socialismo Democrático podría derivar en una campaña “a medias”, con poco ánimo, sin un despliegue masivo de la militancia y con recursos provistos desde las directivas acotados, principalmente, porque esta no es una campaña que se financie con fondos públicos.

La cita en Convergencia Social

En medio del dilema es que este sábado las dos coaliciones se verán las caras para ver cómo enfrentarán la campaña. Por segunda vez, desde que comparten domicilio político en el oficialismo, los representantes de las colectividades de Apruebo Dignidad y el Socialismo Democrático se reunirán para abordar materias relativas al plebiscito.

La convocatoria fue hecha por el diputado Diego Ibáñez (CS) y está programada para las 16.00, en la sede de Convergencia Social. Ahí, buscarán establecer una primera coordinación entre ambos conglomerados y barajar las diferentes posibilidades de articulación.

En CS, de hecho, expresan que existen tres escenarios posibles de cara al 4 de septiembre: uno (menos probable) es que el Socialismo Democrático se sume al comando ya activado de Apruebo Dignidad.

La segunda alternativa -y la que encuentra mayor resonancia en cada coalición- es que exista una coordinación política de fondo, es decir, que las campañas tengan un relato común, pero diferenciadas y apuntando a las distintas sensibilidades políticas que representa cada bloque. Un punto clave es que, a diferencia de Apruebo Dignidad, y una vez que el Socialismo Democrático inicie la campaña, estos últimos podrían posicionarse desde un Apruebo “con matices”. De esta manera, podría tomar fuerza la idea de “aprobar para reformar”, apuntando a que, si gana esa opción, se podrán modificar aspectos de la nueva Constitución que no convencen plenamente a ese mundo político.

Por último, también asoma la opción de no contar con ningún tipo de coordinación, lo que estratégicamente no es visto con buenos ojos en Apruebo Dignidad.

“Para definir las coordinaciones, la conversación tiene que ser en clave política. Esto debería ser un pretexto para tener coordinaciones más periódicas. Solamente nos estamos juntando en el comité político”, dicen en el Socialismo Democrático.

Otro punto a discutir es si existirá una franja conjunta. El Consejo Nacional de Televisión (CNTV) primero debe discutir cómo distribuirá el tiempo entre los participantes de las distintas opciones. Aún no está definido si cada colectivo de la Convención -o los partidos políticos- tendrá un espacio individual. Como sea, desde Revolución Democrática (RD) ya se han ido elaborando primeras piezas audiovisuales “informativas”, de circulación en redes sociales.

Piergentili adelantó que “es importante despejar que las dos coaliciones que apoyan al Presidente están por el Apruebo. Pero podemos tener matices en el ámbito de los puntos críticos que tiene esta nueva Constitución y, por la naturaleza de nuestras visiones, apuntamos a electorados que piensan distinto entre sí. La reunión de mañana (hoy) nos va a permitir sincerar este tema. Creo que hay que establecer ciertos mínimos de colaboración”, concluyó.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.