Durante siete temporadas, Bartolo "Buddy" Valastro se ha consolidado como el repostero más célebre de la televisión. En 2009 el docurreality Cake Boss lanzó a la fama al pastelero de Hoboken, New Jersey, donde en su local Carlo's Bakery no tienen la palabra "imposible" en su diccionario, elaborando complejas tortas y pasteles a los exigentes clientes que llegan a su puerta pidiendo la ayuda del destacado equipo. No solo son postres, sino verdaderas obras de arte. Hoy a las 20.00 horas, a través de Discovery Home & Health (63 VTR, 229 DirecTV), Valastro y compañía regresan con la octava temporada de la serie. "Mi vida es un desafío tratando de ser un pastelero, un padre, un hermano, un hijo. Mantener todo eso junto a Cake Boss es mi verdadero desafío e intentar que todo salga lo mejor posible", cuenta, al teléfono con La Tercera.

Su serie comenzó en 2009 y ha tenido mucho éxito, ¿En qué cambió su vida al entrar a la TV?

Nunca dimensioné, cuando firmé el contrato para el show, que iba a emitirse alrededor de todo el mundo. Al principio fue un poco difícil de asumir porque yo era un hombre común y corriente que se dedicaba a la pastelería en Nueva Jersey y luego todo el mundo me reconocía. Me costó acostumbrarme a eso. La diferencia de programas como el mío, es que tratan de la familia y los niños. Además creo que nosotros inspiramos a la gente a que quieran cocinar y pasar tiempo con la familia. Yo nunca olvidaré de dónde vengo y mis fans fueron quienes me hicieron lo que soy hoy día, por lo que siempre tendré un espacio para dar un autógrafo, sacarme una foto y dar un abrazo. Mis padres me criaron de esa manera.

¿Cuál es la mejor y la peor parte de un programa como Cake Boss? 

Nunca voy a olvidar una vez que estaba en Brasil y una niña me dijo, “¿Sabes por qué me gusta tu show? y yo: ¿Por qué? Y ella dijo: Porque no importa cuán grande sea la torta o el desafío, tú nunca te rindes y eso me hace sentir que puedo hacer cualquier cosa”. El hecho de que lo que hago lleve a los niños a creer en ellos mismo es para mí más importante que cualquier otra cosa. Lo peor es que no hay mucho descanso, entonces no importa a donde vaya, todo el mundo me conoce, y no es que no me gusten los fans, pero hay veces en que me gustaría pasar tiempo con mi esposa y mis hijos.

¿Cuál ha sido el momento más gratificante de su carrera?

Han sido tantos momentos. Me han entregado la llave de la ciudad, he ganado un Kid´s Choice Award de Nickelodeon, hemos abierto más pastelerías. Todos estos momentos me hacen pensar que esto no es real, me cuesta creerlo. Pero una de las cosas por la que me siento más orgulloso en mi vida es mi familia, mi esposa y mis hijos, porque para mí eso es lo primero.

¿Qué es lo que cree que hace a su programa ir reinventándose cada temporada?

Cuando comenzó el show, yo solo tenía una pastelería y ahora tengo trece, también tenía tres hijos y ahora tengo cuatro. Mi vida ha cambiado en estos años y yo creo que la gente se interesa en qué es lo que estoy haciendo en esta parte de mi vida. Solo en los siete años u ocho que hemos hecho Cake Boss han cambiado muchas cosas, así que siempre hay algo nuevo. Hay más de 250 capítulos, así que supongo que lo hemos hecho bien.

Carlo’s Bakery es una pastelería familiar. ¿Cómo se sentiría si sus hijos le dicen que no quieren formar parte del negocio? 

Yo nunca voy a querer que mis hijos hagan algo sintiéndose forzados por mí. Yo siento que soy un exitoso pastelero, pero atribuyo ese éxito a mi amor por lo que hago y a que me encanta hacer mi trabajo. Si yo forzara a mis hijos a hacer este trabajo y ellos lo odiaran, ellos no se desarrollarían, no evolucionarían. Ellos deben tomar una posición en la vida, siendo policía, historiador o pastelero, donde hagan algo que aman, como lo hago yo.