Crítica de cine: Enredados

En una sorpresiva vuelta de tuerca, los estudios Disney prefirieron basar su siguiente largo animado (y en 3D) en un cuento de hadas antes que en nuevos personajes. El cuento de Rapunzel -junto a su brillante y kilométrico pelo-, escrito por los hermanos Grimm, es el que mueve la historia. De hecho, el muy rubio y mágico pelo de la chiquilla es el verdadero protagonista, que se logra ver digitalmente real. La historia es más o menos así: una niña con pelo mágico es raptada por una bruja, con el fin de tener juventud eterna. Así, la chica es encerrada en una torre junto al camaleón que tiene de mascota, hasta que cumple 18 años y comienza a cuestionar su vida y a soñar con ser libre. En paralelo, mientras escapa de la justicia, un cínico ladronzuelo da con la torre y con Rapunzel. Y como es de esperar, luego de una serie de desencuentros, escapan rumbo a la aventura. Es interesante considerar que Enredados trata de ser una historia más clásica para el nuevo cine de animación y, en especial, para Disney. La película se ve elegante en su estética y en su narrativa, y a ratos parece que no fuese hecha por computador. El problema es que la historia es entregada de manera sumamente infantil y más bien cargada hacia las niñas, por lo que cualquier otro espectador corre el peligroso riesgo de aburrirse. Y no es la idea.
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
2.
3.
4.
¿Vas a seguir leyendo a medias?
NUEVO PLAN DIGITAL $1.990/mesTodo el contenido, sin restricciones SUSCRÍBETE