Natascha Kampusch, la joven austríaca secuestrada en marzo de 1998 y que durante más de ocho años estuvo oculta en la casa de su secuestrador, compró esta vivienda a fin de evitar que sea dañada.

"Sé que es grotesco, que tengo que pagar electricidad, agua e impuestos por una casa en la que nunca quise vivir, pero lo prefiero antes que sea destruida por vándalos", afirmó la joven luego de referirse a los motivos que tuvo para adquirir la denominada "casa del horror".

"Nada es tan amenazador como en aquella época, pero al mismo tiempo, todavía es la casa de los horrores para mí", comentó la joven de 20 años a la revista alemana Der Spiegel, a la vez que reconoció haber visitado la casa tras su liberación.

Kampush fue secuestrada por

Wolfgang Priklopil

cuando tenía diez años de edad. Durante años permaneció en una pequeña habitación sin ventanas, de donde huyó el 23 de agosto de 2006. Ese mismo día su raptor se suicidó, arrojándose frente a un tren.