Un panda gigante del zoológico de Pekín atacó a un intruso que se metió en su jaula para recuperar un juguete que había tirado su hijo pequeño.

El panda de 110 kilos, Gugu, mordió en las piernas al hombre. Se trata del tercer ataque de este oso en los últimos tres años.

En 2007, un adolescente de 15 años sufrió graves daños en las piernas cuando Gugu lo atacó después de que atravesara la valla para abrazarlo.

Gugu también mordió e hirió gravemente en una pierna a un borracho que se metió en su jaula el año anterior.

Tras el ataque los responsables del zoológico se comprometieron a pagar el tratamiento médico del afectado, pero señalaron que no son responsables porque hay numerosos letreros de alerta fuera de la jaula y personal al que el hombre habría podido pedir ayuda para rescatar el juguete.

Más de 180 pandas gigantes viven en cautiverio en todo el mundo, y unos 1.590 siguen en libertad, la mayoría en las montañas de Sichuan. Se ven amenazados por la pérdida de su hábitat, la caza furtiva y su baja tasa de reproducción.